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Los 14 incendios de un Tesla desde 2012 han sido portada en los grandes medios, que no han cubierto ninguna de las 137 fugas de petróleo en Estados Unidos solo en 2018

Cada vez que un Tesla se incendia, este fuego se extiende a todos los medios que cubren la noticia con gran velocidad. Y eso a pesar de que las estadísticas muestran que los coches eléctricos sufren este evento mucho menos que los modelos de combustión, y como ejemplo los apenas 14 casos de Tesla desde el lanzamiento en 2012 del Model S.

Estos casos han sido cubiertos con gran detalle por parte de los grandes medios, que han visto un filón en unos incidentes que se han saldado siempre con daños materiales. Pero curiosamente estos medios no cubren otros grandes problemas medioambientales, como por ejemplo las 137 fugas de petróleo que las explotaciones de crudo han sufrido sólo en Estados Unidos el pasado año.

Al ser pequeños incidentes, nada comparado con los grandes desastres medioambientales de pasados años, estas «fugas» no reciben la atención de los grandes medios que miran para otra parte en lo que es una catástrofe a pequeña escala, pero continuada. Y es que los datos que ofrece la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) son realmente impresionantes.

En 2018 las explotaciones de petróleo de Estados Unidos han sufrido una media de 11 fugas cada mes. Estas pueden ser detectadas de forma directa y producirse tanto en tierra o en el mar, como la rotura de un contenedor, un incendio en una refinería…etc, o ser detectados de forma indirecta, como con el avistamiento de una gran marcha en el océano.

Y a pesar de ser denominadas pequeñas, estas fugas según la agencia norteamericana pueden ir desde los apenas 113 litros, hasta algunas que llegan a los 7.9 millones de litros, siendo una «gran fuga» para los organismos como la  International Tanker Owners Pollution Federation Limited (ITOPF) aquellas que superan los 800.000 litros. De las 137 fugas detectadas por la NOAA en 2018, 25 de ellas han tenido un tamaño medio o grande.

Un continuo desastre medioambiental y económico, que como decimos no es portada de los grandes medios que por otra parte si dan repercusión a cualquier incidente en el que esté involucrado un Tesla, ya sea un incendio de una de sus unidades, como un accidente de un modelo que presuntamente circulaba en Autopilot.

Algo que supone sin duda un agravio comparativo, pero que puede tener una lectura positiva y es que algo debe estar haciendo bien Tesla, y la industria del coche eléctrico en general, para tener a buena parte de la prensa en su contra y atentos a cualquier pequeño error por su parte.

Podéis ver el seguimiento de estos incidentes en la siguiente web: Response

Vía | Cleantechnica

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