Hace unos meses, Mercedes-Benz presentó su primer coche eléctrico de nueva generación, el EQC 400 4MATIC. Un SUV ubicado en el segmento D que será el primer integrante de una extensa gama de coches 100% eléctricos denominada EQ, y en la cual podremos encontrar un compacto (EQA), un SUV compacto (EQB), una berlina de lujo (EQS), una furgoneta de pasajeros (EQV), modelos urbanos (Smart EQ fortwo y Smart EQ forfour), etc.
Cuando fue presentado, el EQC decepcionó a algunos internautas por contar con una batería de 80 kWh, una capacidad algo limitada frente a rivales de características similares. Sin embargo, finalmente el modelo alemán ha logrado homologar 416 km WLTP, una cifra cercana a la del Audi e-tron (417 km) y superior a la del Tesla Model X Standard Range (375 km WLTP).
Las prestaciones conseguidas por el EQC son bastante interesantes, pues gracias a sus 408 cv de potencia y a su tracción total inteligente 4MATIC es capaz de hacer el 0 a 100 km/h en apenas 5,1 segundos. Además, cuenta con una solución de carga rápida muy práctica: según el mercado se ofrecerá con una toma de carga u otra. Así, en Estados Unidos tendrá CCS Combo 1, en Europa CCS Combo 2, en China GB-T, en Japón CHAdeMO…
Con un precio de partida de 77.425 euros en nuestro país, el Mercedes-Benz EQC comenzará a llegar a sus primeros propietarios europeos en verano de 2019, estando previsto su desembarco a Estados Unidos en 2020. El objetivo de la marca es conseguir alcanzar una producción diaria de 100 unidades del modelo para este año, llegando a las 200 en 2020. Ahora, los medios internacionales están comenzando a realizar las primeras pruebas del vehículo en condiciones reales. ¿Está convenciendo el nuevo coche eléctrico de Mercedes-Benz a la prensa?
Uno de los aspectos que señalan los periodistas es que debido al uso de la plataforma del GLC, el EQC no está tan bien aprovechado por dentro como otros modelos eléctricos. Así, el espacio de la segunda fila es correcto y su maletero de 500 litros más que suficiente, pero en ningún momento destacan frente a la competencia. Además, y a pesar de que el sistema multimedia MBUX con realidad aumentada procedente del Clase A tiene una respuesta muy buena, las pantallas quedan algo pequeñas en el EQC, y el volante en ocasiones no permite visualizar correctamente la extensa información. La visibilidad del coche tampoco es uno de sus puntos fuertes.
Como aspectos positivos, se destaca la calidad constructiva, similar a la del Audi e-tron y superior a la de modelos como el Jaguar I-Pace o el Tesla Model X. El Mercedes-Benz dispone de cuatro modos de conducción (Eco, Comfort, Sport y Maximum Range), destacando este último: utilizando la navegación, las cámaras y los sistemas de monitorización, el coche es capaz de restringir las velocidades máximas y predecir la cantidad de frenada regenerativa a aplicar de forma automática (en modo manual se pueden utilizar las levas tras el volante para regular la frenada regenerativa).
Aparentemente, el EQC es un modelo muy silencioso comparado incluso con otros coches eléctricos gracias a su gran aislamiento y al escaso ruido aerodinámico y de rodadura. La aceleración es rápida y el confort de marcha impecable y superior al de sus rivales incluso en terreno roto; a cambio, su chasis no se muestra especialmente ágil, con una dirección poco comunicativa.
Fuente | Auto Express
