El Tesla Model 3 fue el coche de lujo más vendido en Estados Unidos en el año 2018, un dato bastante interesante, especialmente si se tiene en cuenta que Tesla solo vende en 10 estados de forma oficial, ya que 11 estados han prohibido la venta de sus coches y otros han restringido las tiendas que puede tener la marca californiana.
Tesla ha conseguido vender más unidades de sus coches eléctricos que su competencia más directa, contando con la desventaja de no disponer de venta directa en todos los estados del país, a diferencia de la mayoría de los otros fabricantes. Conociendo estos datos, el número de unidades vendidas de, por ejemplo, el Tesla Model 3, se hace más impresionante.
El éxito de Tesla no es visto con buenos ojos por otros fabricantes de la competencia, los cuáles han tenido que adaptar sus gamas a la llegada de los coches eléctricos causa, en gran medida, por el fabricante estadounidense. La competencia de Tesla defiende la prohibición de la venta de los coches de la marca en la mayoría de los estados alegando que es una medida para proteger al consumidor.
En el estado de Virginia, Tesla estaba limitada a tener únicamente una tienda, sin embargo, el departamento de vehículos a motor (DMV) de Virginia, permitió a Tesla abrir una segunda tienda en su estado. Mientras tanto, la asociación de concesionarios de Virginia (VADA) demandó a la DMV por esta decisión, para intentar que la apertura de esta segunda tienda no se llevase a cabo. Más de dos años después de esta demanda, el juez falló a favor de DMV y se ha permitido abrir esta segunda localización sin problemas legales.
Como podemos ver con ejemplos como este, la batalla, muchas veces legal, de Tesla para poder vender sus coches eléctricos en algunos estados dificulta la posibilidad de llevarlos a la mayor cantidad de gente interesada posible. Estando limitada a solo 10 estados, por el momento, no puede conseguir las ventas que debería, pero aún así, sus resultados son excelentes pese a las limitaciones logísticas que sufren.
Por desgracia, parece que a Tesla le queda una ardua y larga batalla por delante para poder llevar sus coches a los 50 estados del país, algo que tal vez nunca ocurra si no cambian las cosas para bien. Es una situación rara y anormal para alguien que lo ve desde fuera de su país de origen, ya que estas limitaciones no existen en otros territorios como Europa.
Fuente | Forbes
