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Renault-Nissan lograrán una reducción de costes del 30% de sus coches eléctricos gracias al uso de la plataforma CMF-EV

Renault-Nissan lograrán una reducción de costes del 30% de sus coches eléctricos gracias al uso de la plataforma CMF-EV
Carlos Noya
Carlos Noya[email protected]

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Publicado: 27/07/2020 08:29

Para muchos la estrategia del grupo Renault-Nissan de dividir sus caminos por rutas diferentes en su aproximación al coche eléctrico, supuso un error que ha frenado la expansión de ambos programas. Algo que rectificarán en parte de cara a la nueva generación en un cambio que desde Renault aseguran supondrá el lograr unas importantes reducciones de costes de componentes como baterías y motores.

En una entrevista con el portal Autonews, Jean-Paul Drai, director de desarrollo de producto en el programa de coches eléctricos de Renault, ha indicado que el uso de la plataforma común en la nueva generación permitirá lograr acelerar las sinergias, y reducir los precios de forma notable.

Según el Sr Drai, gracias al uso de la nueva plataforma CMF-EV, lograrán rebajar un 30% el coste de desarrollo de la propia plataforma, otro 30% en las baterías, y un 20% el de los motores eléctricos. Los tres elementos clave de un coche eléctrico.

Otro avance de la arquitectura común ha sido el lograr la mejora en el proceso de carga gracias a la introducción de una nueva gestión térmica del vehículo y la batería, que funcionará de forma más eficiente en diferentes tipos de carga.

Esto permitirá que la nueva generación de coches eléctricos de Renault y Nissan logre llegar al mercado con unos precios muy similares a los modelos con motor de combustión. Algo que ha confirmado el directivo de Renault que ha insistido en el objetivo que se ha marcado la marca de conseguir este hito lo antes posible.

Como recordamos, los nuevos modelos eléctricos de Renault se basarán en la plataforma modular CMF-EV de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, la cual permitirá al grupo franco-japonés cubrir los segmentos B, C y D (es decir, urbanos, compactos y familiares). Esto será posible gracias a que la arquitectura se podrá adaptar a diversas distancias entre ejes, anchuras y alturas.

Al igual que ocurre con la plataforma MEB de Volkswagen y otras arquitecturas desarrolladas exclusivamente para coches eléctricos, la plataforma CMF-EV será de tipo skate-board (baterías en los bajos, motores eléctricos en los ejes). Esto permitirá lanzar vehículos con toda clase de configuraciones mecánicas (tracción delantera, tracción trasera, tracción total), así como aprovechar al máximo el espacio (voladizos recortados, amplia distancia entre ejes, piso extraplano…).

De acuerdo con Emmanuel Bouvier, Director de Ventas y Marketing de Vehículos Eléctricos y Servicios de Movilidad del Grupo Renault, con la nueva plataforma CMF-EV la firma no entrará en la carrera por conseguir las baterías de mayor capacidad, sino que se centrará en lograr el mejor compromiso entre coste y autonomía mediante las economías de escala, algo debido entre otras cosas a las previsiones que señalan que en los próximos años los subsidios a los coches eléctricos se reducirán.

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Las baterías de Renault serán modulares y se adaptarán a cada coche, apuntando a una autonomía óptima de entre 550 km y 600 km (entendemos que bajo el ciclo de homologación WLTP). Es interesante recordar que actualmente Renault ofrece con el ZOE uno de los coches eléctricos con mejor relación precio/autonomía del mercado, filosofía que aparentemente se mantendrá en los próximos lanzamientos de la marca.

Pero la pregunta es hasta dónde llegarán los precios con estas rebajas en los costes de producción. Por supuesto que bajen un 30% no quiere decir que los precios de los coches vayan a seguir la misma tendencia. Es muy posible que esta rebaja sirva para dejar atrás la fuerte dependencia de los coches eléctricos de las ayudas públicas, acercando algo su precio a los costes de las versiones diésel o gasolina equivalentes, aunque posiblemente sigan durante unos años por encima.

En el caso de Renault ZOE, con un precio antes de incentivos de 30.523 euros para la versión de 52 kWh, en caso de aplicar de forma directa un 20% supondría restar unos 6.000 euros al precio del vehículo, algo que sumando las ayudas públicas en España nos daría un coste estimado de unos 19.000 euros. 

Un coste que le acercaría bastante al precio de un Renault Clio diésel de equipamiento intermedio, y eso sin contar con los ahorro en costes operativos que permitiría a muchos cuadrar las cuentas para dar el salto al coche eléctrico.

El primer modelo en beneficiarse de esta reducción de costes será un B-SUV cuya producción comenzará a finales de este 2020, y cuyo lanzamiento está previsto para la primera mitad de 2021. Un lanzamiento que supondrá muy posiblemente la reducción de costes del propio ZOE que a pesar de no compartir plataforma, si tendrá que adaptar sus tarifas para no estar cerca de este nuevo modelo que muy posiblemente tendrá un importante impacto en la política de precios del fabricante francés.

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