De un tiempo a esta parte, diversos directivos de Toyota han expresado su deseo de recuperar la clásica línea de deportivos «Three Brothers», integrada en su momento por los MR2, Celica y Supra. Actualmente la firma cuenta con dos modelos de este tipo, el GR 86 y el GR Supra, ambos con motores de combustión interna de cuatro o seis cilindros.
A pesar de que la pandemia mundial y la tibia recepción del nuevo Supra parecían haber trastocado los planes de Toyota, aparentemente la firma japonesa no ha renunciado a la idea de lanzar un tercer deportivo: de acuerdo con fuentes internas, actualmente la marca se encuentra trabajando en un modelo tecnológicamente avanzado que retomará la denominación Celica.
Este proyecto se encuentra en sus etapas de desarrollo primigenias, pues todavía no se ha tomado una decisión final acerca del tipo de tren motriz que equipará. «Toyota no cree que los vehículos eléctricos vayan a ser necesariamente la única solución de futuro. Estamos pensando en cómo lidiar con la neutralidad de emisiones desde una perspectiva más amplia».
Aunque la empresa estaría evaluando la posibilidad de equipar al nuevo Celica con una pila de combustible o incluso con un motor térmico capaz de funcionar con hidrógeno, la falta de infraestructura podría inclinar la balanza hacia las baterías, pues un modelo de este tipo podría tener una acogida mucho mejor en mercados como Estados Unidos o Europa.
Apostar por un eléctrico a baterías no solo permitiría a Toyota aspirar a un mercado mucho mayor, sino que también haría posible llevar a cabo un importante ahorro de costes gracias al uso de la plataforma e-TNGA, que utilizarán numerosos eléctricos puros de la submarca BZ («beyond Zero», la nueva gama de coches eléctricos de Toyota), así como de Lexus y Subaru.
Esta arquitectura está preparada para acoger configuraciones de tracción delantera, trasera y total. Dado el carácter deportivo del Celica, lo más probable es que Toyota apueste por ofrecer las dos últimas alternativas (si bien no está de más recordar que las últimas generaciones del Celica abandonaron la tracción trasera en favor de la delantera).
El nuevo Toyota Celica podría servir como buque insignia de la familia BZ; además, al ser un modelo de altas prestaciones, podría ser el más indicado para estrenar las nuevas baterías de electrolito sólido que la empresa lleva años desarrollando, lo que reforzaría su carácter «tecnológicamente avanzado» y lo convertiría en todo un pionero dentro de la industria.
Fuente | The Drive
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