Opinión. Esto es un coche eléctrico señores diputados españoles, no le teman
Hace unos días el parlamentario y portavoz del partido laborista australiano Chris Bowen, se hizo viral en las redes en su discurso para que el país abrazase de forma definitiva las fuentes de energía renovables llevando a una sesión una placa solar. Durante su presentación indicó al resto de grupos que aquello era energía renovable y que no le temiesen. Algo que podríamos extender a nuestro país al coche eléctrico que se ha visto duramente castigado por unas políticas totalmente chapuceras que frenan su despegue.
Muchos pensarán que después de años de ostracismo total con presupuestos de risa que se terminaban en cuestión de horas, la llegada del Moves III supondría por fin un paso adelante enorme por sus 400 millones de euros de dotación y una extensión que podrá llegar al 2023.
Pero el problema es que con el formato actual, la utilidad del plan de ayudas se queda en casi nada. Todo por culpa de un diseño realizado desde el profundo desconocimiento y desde posiciones elitistas de un personal muy bien pagado que piensa que todo el monte es orégano.
Y es que tal como nos han contado múltiples lectores en correos que nos han llegado, para comprarse un coche eléctrico en España con ayuda, primero el cliente debe adelantar el 100% del precio de compra, y luego esperar pacientemente a que la administración le ingrese la ayuda en su cuenta. Y eso si sucede ya que hay muchos relatos de gente que a estas alturas todavía está esperando las ayudas del 2020. Un completo desastre.
Por eso no estaría de más que algún diputado o diputada con dos dedos de frente acudiese al parlamento con una foto de un coche eléctrico y le explicase a los miembros del gobierno que no le tengan miedo, que los beneficios para un país fuertemente dependiente energéticamente como España serán enormes. No sólo en la reducción de la importación de hidrocarburos, sino también en la salud de millones de españoles expuestos a la contaminación de los tubos de escape.
Un impacto que irá más allá ya que como hemos visto en anteriores artículos, allí donde se implanta el coche eléctrico las energías renovables viven un fuerte impulso por la enorme sinergia que se logra combinando ambas tecnologías en aspectos como la creación de empleo en la instalación de renovables, pero también en la expansión y mantenimiento de las redes de recarga, e incluso la producción y reciclaje de baterías.
Un plan MOVES que tal como ha sucedido hace años con los Movele, tendría que aplicar el descuento en el concesionario para que el cliente pueda realizar una operación de compra o de financiación con unos números mucho más fáciles de justificar o afrontar, y es que no es lo mismo acudir al banco para financiar 39.000 euros, que hacerlo para 32.000 euros. Una diferencia notable que para muchos supone poner el freno y esperar a tiempos mejores para dar el salto.
Un efecto Osborne favorecido por el desastroso diseño de un plan de ayudas que no tiene comparación en Europa, donde las ayudas son directas y los clientes no tienen que esperar a que su región o estado federal las active cuando tengan un rato libre. Algo que sucede en España y que nos está dejando a la cola muy por detrás de los grandes mercados, Alemania, Francia o Italia, pero también en porcentaje de otros como nuestros vecinos de Portugal.
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