¿Quieres estar informado diariamente con las últimas novedades del mundo del motor?

Ahora no Permitir

Confirmado: en 2024 Stellantis discontinuará los Dodge Challenger y Charger térmicos, que serán sustituidos por sendos muscle cars eléctricos

La era de los muscle cars térmicos está próxima a su final. Estos salvajes deportivos norteamericanos sedientos de gasolina nacieron en los boyantes años 60, y aunque la crisis del petróleo de principios de los 70 casi acabó con ellos, algunos se las apañaron para sobrevivir hasta nuestros días, protagonizando un sonoro renacimiento en los 2000 con el Ford Mustang de quinta generación y la reaparición de los Chevrolet Camaro y Dodge Challenger.

Sin embargo, nada es eterno. El Mustang va camino de convertirse, más que en un único modelo, en una submarca dentro de la alineación de Ford, como demuestra el SUV eléctrico Mustang Mach-E, que está cosechando un enorme éxito en los principales mercados del mundo. El Camaro, cuyas ventas llevan años languideciendo, podría transformarse en un sedán eléctrico en su próxima encarnación.

Con todo, Dodge tiene su propia visión del asunto. Los Challenger y Charger son actualmente el corazón de su gama y, a pesar de su veteranía, el lanzamiento de versiones de altas prestaciones como los Hellcat o el monstruoso Demon ha permitido que ambos modelos mantengan una salud comercial envidiable en su mercado natal.

Tim Kuniskis, director ejecutivo de la compañía, ha confirmado que en 2024 finalizará la producción de los Challenger y Charger de gasolina. Ambos serán reemplazados por sendos modelos eléctricos, los cuales irán incluso un paso más allá que sus antecesores en materia de prestaciones puras, manteniendo intacta su indomable esencia.

Dodge utilizará la plataforma STLA Large de Stellantis

El primer prototipo eléctrico de Dodge verá la luz en los próximos cuatro o cinco meses. Aunque todavía no se sabe si los modelos definitivos mantendrán las denominacionales Challenger o Charger, Dodge reconoce que ambos nombres son muy valiosos por su importante legado histórico, lo que nos lleva a pensar que se les dará continuidad.

Los nuevos Challenger y Charger se asentarán sobre la plataforma STLA Large del grupo Stellantis, la matriz de Dodge. Esta arquitectura, en cuyo desarrollo están participando algunos técnicos de Alfa Romeo que en su momento estuvieron involucrados en la creación de la celebrada plataforma Giorgio de los Giulia y Stelvio, se empleará en vehículos de entre 4,70 y 5,5 metros de largo.

Sus baterías tendrán entre 101 y 118 kWh de capacidad, mientras que su autonomía máxima se situará en unos 800 km WLTP. Además, podrá equipar dos tipos de módulos de accionamiento: uno de entre 170 CV (125 kW) y 245 CV (180 kW) y otro de entre 204 CV (150 kW) y 449 CV (330 kW). Dado que la plataforma STLA Large estará preparada para albergar tres unidades propulsoras, sobre el papel sería posible lograr potencias muy superiores a los 1.000 CV. Por otro lado, también contará con un sistema eléctrico de 800 voltios, por lo que será compatible con recargas ultra-rápidas.

Fuente | Electrek

Relacionadas | Nuevos detalles de Atlante, la ambiciosa red de carga rápida de Stellantis para el sur de Europa

Compártelo: Compartir en WhatsApp Compartir en Menéame