La Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi triplicará sus inversiones en electrificación

Esta semana, la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi presentará su nuevo plan estratégico de electrificación. Entre otras cosas, los informes preliminares señalan que el grupo franco-japonés triplicará sus inversiones en esta tecnología, algo que le permitirá mantener su competitividad frente a rivales como el Grupo Volkswagen.

La Alianza, que no es un grupo integrado, buscará profundizar la cooperación de sus distintos integrantes para acelerar desarrollos y reducir costes. Se espera que el próximo jueves se anuncien unas inversiones de 20.000 millones de euros durante los próximos cinco años para el desarrollo de vehículos eléctricos, que se unirán a los 10.000 millones anteriores.

De cara al año 2030, la Alianza producirá más de treinta modelos eléctricos diferentes, una completa oferta articulada sobre cinco plataformas comunes. Estas arquitecturas servirán como base para el 90% de los coches eléctricos que las tres empresas desarrollen y lancen para finales de la década.

Hasta el momento, el grupo ha desarrollado cuatro de esas plataformas, a las que se unirá a mediados de la década la CMF-BEV, que derivará de la CMF-B térmica y se empleará en automóviles pequeños. Aunque el encargado de estrenarla será el esperado remake del Renault 5, todo parece indicar que Nissan ya se habría comprometido a emplearla en el próximo Micra.

La Alianza utilizará las baterías de electrolito sólido de Nissan

El objetivo perseguido con la plataforma CMF-BEV es lograr un precio similar al de los modelos térmicos de tamaño equivalente; es decir, menos de 20.000 euros antes de ayudas. Por lo tanto, la CMF-BEV entrará en competencia directa con la MEB Small del Grupo Volkswagen, pues la compañía alemana aspira a una horquilla de precios similar.

Por otro lado, la Alianza también planea invertir en la producción de baterías, alcanzando para 2030 un total de 220 GWh de capacidad en países como China, Francia, Gran Bretaña o Japón. La estandarización de las baterías, que serán compartidas por los distintos integrantes del conglomerado, permitirá reducir a la mitad sus costes de fabricación.

Además, también se espera que Renault y Mitsubishi se beneficien de las baterías de electrolito sólido que Nissan actualmente está desarrollando. La ambición de la firma nipona no es poca, pues aspira a comenzar a producirlas en 2028 a un precio de 75 dólares/kWh, cifra que más adelante rebajará a 65 dólares/kWh.

Fuente | Reuters