Rolls-Royce ha revelado su primer coche eléctrico de producción, el Spectre. Este coupé está llamado a sustituir al Wraith dentro de la gama del fabricante británico. A pesar de que ya ha sido presentado, los primeros clientes no recibirán sus unidades hasta el cuarto trimestre de 2023, por lo que todavía le queda un año de desarrollo por delante.
El Rolls-Royce Spectre utiliza la misma plataforma de aluminio que los Ghost, Cullinan y Phantom. Mide 5,45 metros de largo, tiene una distancia entre ejes de 3,21 metros y pesa 2.975 kg; además, gracias a la situación de las baterías en los bajos es un 30% más rígido que otros modelos de la marca. Aunque no se ha dado a conocer el tamaño del pack, sí que se sabe que su autonomía se situará en 520 km WLTP.
Con 585 CV (430 kW) de potencia y 900 Nm de par, este gran turismo de altos vuelos puede completar el 0-100 km/h en apenas 4,5 segundos. Sin embargo, lo más importante en un Rolls-Royce no son ni sus prestaciones ni su autonomía, sino la opulencia de su diseño y el lujo de su habitáculo. Y el Spectre va bien servido en ambos aspectos.
El recién llegado hace gala de la calandra más ancha jamás montada en un Rolls-Royce, la cual está iluminada por 22 LED. Sus faros a doble altura con el módulo superior formado por una delgadísima línea LED y el inferior oscurecido le otorga un aspecto distinguido que supone dar una vuelta de tuerca al conservador lenguaje de diseño de la marca.
El Rolls-Royce Spectre llegará al mercado a finales de 2023
Aunque el Spectre se percibe al primer golpe de vista como un auténtico Rolls-Royce, su aspecto es más moderno sin perder un ápice de elegancia. El cerco de las ventanillas cromado y los pilotos recuerdan poderosamente a los del desaparecido Wraith. Como no podía ser de otra forma, las puertas son de apertura a contramarcha, mientras que las ruedas tienen 23 pulgadas de diámetro.
Su salpicadero no difiere demasiado del de otras propuestas de la compañía, si bien el volante es algo más pequeño y tiene un aro más grueso. El salpicadero está presidido por tres paneles (instrumentación digital, pantalla táctil del sistema de infoentretenimiento y display del copiloto), mientras que el efecto «estrellado» del techo ahora también se extiende a las puertas.
A nivel de chasis habría que destacar el sistema de suspensión Planar, capaz de desacoplar las barras estabilizadoras para evitar balanceos en línea recta. Por supuesto, no faltan un sistema de ruedas traseras directrices y la amortiguación adaptativa.
