La empresa naviera noruega Havila Kystruten ha prohibido que se transporten vehículos eléctricos e híbridos en sus barcos, ya que los considera potencialmente propensos a incendiarse.
El incendio sufrido por el Felicity Ace en febrero del año pasado ha animado a la naviera noruega Havila a tomar una decisión muy polémica y que a buen seguro generará opiniones para todos los gustos.
Y es que, a pesar de operar en uno de los países pioneros en la adopción del coche eléctrico, esta naviera ha tomado la decisión de prohibir su entrada en los barcos que navegan por el Mar del Norte, realizando rutas entre Bergen, Trondheim, Tromso y Kirkenes.
En 2022, las matriculaciones de coches nuevos en Noruega alcanzó una cifra récord del 80 % del total, pero eso no ha impedido a la naviera negar la entrada de este tipo de vehículos a sus barcos.
Bicis y patinetes sí, coches no
El mencionado incendio del Felicity Ace supuso la pérdida de miles de vehículos eléctricos nuevos, así como pérdidas millonarias y el hundimiento final del navío.
En ese caso, no hablamos de únicamente de transporte de mercancías, sino también de turistas y pasajeros que viajan con sus vehículos.
Así lo indica en la sección de preguntas y respuestas de su web, en la que especifica tajantemente que «los automóviles eléctricos, híbridos y de hidrógeno están prohibidos a bordo».
Sin embargo, sí permite el transporte de bicicletas y patinetes eléctricos, aunque no permite recargas a bordo y estos deben almacenarse en un lugar específico.
Una simple cuestión de seguridad
La decisión de detener el transporte de automóviles eléctricos, híbridos y de hidrógeno a bordo se debe a preocupaciones de seguridad, afirma la naviera.
Bent Martini, el jefe de la compañía naviera que en estos momentos pasa por dificultades económicas, califica la prohibición como una «evaluación de seguridad pura», agregando que «un posible incendio en automóviles eléctricos, híbridos o de hidrógeno requerirá esfuerzos de rescate externos y puede poner en peligro a las personas a bordo y a los barcos».
Martini añade que su compañía se toma «la seguridad en serio y, por supuesto, es un riesgo que bajo ninguna circunstancia estamos dispuestos a correr».
Havila Kystruten afirma que está trabajando para encontrar soluciones que puedan minimizar el riesgo de transportar este tipo de vehículos en el futuro. «Somos plenamente conscientes de que existe cierta expectativa, especialmente de la comunidad costera, de que los barcos a lo largo de la ruta costera deben ayudar con el transporte de vehículos motorizados privados entre puertos», dijo Martini.
«Al mismo tiempo, no es un requisito en el acuerdo con el Ministerio de Transporte que los barcos en la ruta costera deban transportar automóviles privados», ha aclarado en relación a las posibles consecuencias legales de la medida.
Se da la circunstancia de que los barcos de Havila Kystruten tienen los paquetes de baterías más grandes instalados en cualquier barco de pasajeros. Pero el propietario, controlado por la familia Saevik, afirma que no representan un riesgo para la seguridad.
«Nuestros barcos se construyen con sus propios paquetes de baterías y se instalan de acuerdo con los requisitos actuales de seguridad contra incendios en los barcos. Esto significa que nuestras baterías están divididas en salas aisladas e ignífugas, con sistemas específicos de protección contra incendios», ha aclarado el CEO de Havila.
Fuente: Tradewindsnews.com
