Aclarando algunos mitos sobre los cuidados de la batería de un coche eléctrico

En diferentes ocasiones hemos dado consejos para lograr mantener la batería de nuestro coche eléctrico en las mejores condiciones posibles. Por supuesto, esto dependerá de muchos factores, como la química de la batería o el entorno y clima de donde nos movamos. Pero muchas veces estos consejos se han malinterpretado creando una extraña sensación de que con algunos comportamientos puntuales podremos dañar la batería para siempre.

Y es que dentro del mundo del coche eléctrico hay establecida una regla denominada 80/20. Esto supone que debemos mantener la carga de a batería dentro de un arco de entre el 80% y el 20%. En caso contrario degradaremos la batería.

Pero esto no es del todo cierto. Los diferentes estudios han demostrado que mantener la batería dentro de un nivel de carga medio es la mejor forma de alargar la vida de la misma ya que en un nivel muy algo de voltaje las celdas se estresan y pueden llegar a degradarse. Lo mismo con una descarga muy profunda.

La cuestión a aclarar es que esto no quiere decir que si un día hacemos una carga al 100%, o la llevamos al 5%, la batería se vaya a degradar. Esta degradación tendrá lugar si abusamos del estado de carga (SOC) de forma habitual, o por ejemplo si dejamos el coche al 100% o por debajo del 10% durante semanas o meses. Entonces si correremos el riesgo de pérdida de capacidad.

Si vamos a hacer un viaje, no pasará absolutamente nada si dejamos el coche toda la noche con la carga al 100%, ni tampoco pasará nada si durante nuestro recorrido la batería baja al 10% o al 5%. Simplemente debemos cargar la batería cuando sea posible, ya que incluso cuando la batería está bajo mínimos, el fabricante ha establecido un margen de protección que supondrá que en la práctica el SOC de la batería sea más alto de lo que pensamos.

La regla del 20% de descarga tiene más bien un componente de seguridad de cara a no quedarnos tirado en la carretera por falta de carga. Y es que a diferencia de los coches con motor de combustión, la red de carga no es demasiado extensa y es por eso que debemos guardar una reserva por si cuando lleguemos, el punto está ocupado, o está inactivo, o cualquier cosa que puede hacer que tengamos que buscar un plan B.

En cuanto al 80%, en este caso durante los viajes esta cifra tiene un componente de eficiencia en cuanto a tiempos. Y es que cargar por ejemplo del 15% al 80% puede llevarnos menos tiempo como pasar del 80 al 100%, y por eso realizamos nuestras pruebas de autonomía del 80 al 15% por autovía. No por que la batería se dañe, sino por una simple cuestión de eficiencia en cuanto a tiempos de espera. 

Es por eso que lo ideal en estos casos es hacer paradas un poco más cortas en tiempo, para de esa forma optimizar el proceso. Además hay que añadir que salvo imperiosa necesidad, reducir el proceso al 80% también permite mejorar la rotación en las estaciones de carga y no entorpecer a otros usuarios. Pero podremos cargar hasta el 100% sin mayores problemas más allá del largo tiempo de espera.

La conclusión puede ser que cuando hacemos uso del coche eléctrico, no debemos estresarnos de si la carga es demasiado alta o demasiado baja, a no ser que vayamos a dejar el coche aparcado durante un largo periodo de tiempo.

Ni dejarlo al 100% unos días ni bajar al 5% durante nuestros viajes van a dañarlas, por lo que solamente tendremos que preocuparnos de disfrutar del viaje.