Volkswagen quiere ser un fabricante 100% eléctrico en el mercado europeo de cara al año 2033. Por este motivo, la firma alemana ya ha puesto fecha de caducidad a algunos de sus modelos térmicos más icónicos, incluidos el Polo y el Golf, cuyas actuales generaciones serán las últimas en contar con motores de combustión interna.
Thomas Schäfer, CEO de la marca, ha llegado incluso a concretar durante una reciente entrevista con Automobilwoche cuál será el último automóvil de la gama con propulsores gasolina y diésel: el próximo T-Roc, que verá la luz en 2025-2026. Actualmente, el SUV compacto se erige como el principal superventas de la compañía en el viejo continente, lo que explicaría la decisión de Volkswagen de darle un balón de oxígeno hasta 2033.
Aunque los Passat, Tiguan y Touareg térmicos también contarán con nuevas generaciones, su vida comercial finalizará antes que la del T-Roc. Durante unos años, todos ellos se venderán en paralelo a sus respectivos reemplazos eléctricos (ID.7, ID. Tiguan e ID.6).
Se espera que el nuevo T-Roc térmico también conviva con un posible ID. Roc eléctrico, pues la empresa registró esta última denominación hace apenas unas semanas. Los rumores apuntan a que este será el nombre que recibirá el inédito SUV asignado a la planta española de Landaben (Navarra), donde también se ensamblará el Skoda Elroq.
El Volkswagen ID. Golf sustituirá a los Golf Mk8 e ID.3
Otros modelos de la marca no tendrán tanta suerte, pues el Polo será discontinuado el año que viene. Su heredero eléctrico, que se basará en el prototipo ID. 2all Concept, comenzará a ensamblarse en Martorell (Barcelona) a mediados de 2025, por lo que Volkswagen no tendrá un representante en el competido segmento B (utilitarios) durante prácticamente un año.
El Golf eléctrico por su parte se hará esperar como mínimo hasta el año 2028, lo que nos lleva a pensar que se asentará sobre la plataforma SSP (lo que significa que, como el próximo Renault Megane E-TECH, tendrá un sistema de 800 voltios). Conocido por la prensa como ID. Golf, se encargará de reemplazar tanto al Golf Mk8 como al ID.3, que no recibirá una nueva generación.
Todo apunta a que Volkswagen planea abandonar su actual sistema de nomenclaturas alfanuméricas para nombrar a sus coches eléctricos, abrazando un sistema mixto que combine las siglas ID. con denominaciones clásicas. Si bien es poco probable, esto podría llevar a que el ID.7 se renombre como ID. Passat antes de su presentación oficial.
Fuente | Automobilwoche
