Durante los nueve primeros meses del año, Volkswagen ha vendido 531.500 coches eléctricos, un importante incremento del 45% respecto a las 366.600 unidades que entregó en el mismo periodo del año pasado. Sin embargo, no todo son buenas noticias, pues su banco de pedidos en Europa se ha reducido en un 50%.
Arno Antlitz, director financiero del grupo alemán, explica que el menor volumen de pedidos se debe en gran medida a la «desaceleración general del mercado». Actualmente, la compañía acumula 150.000 pedidos de su gama eléctrica, frente a los 300.000 que tenía a estas alturas en 2022, si bien hay que tener en cuenta que la crisis en el suministro de semiconductores causó importantes cuellos de botella en las entregas.
A día de hoy, Europa se constituye como el principal mercado para los coches eléctricos de Volkswagen, representando un 64% de su volumen total. Hildegard Wortmann, responsable de marketing, señala que la desaceleración de la demanda impedirá a la empresa lograr sus ambiciosos objetivos.
Por este motivo, sus previsiones se han reducido a la baja. Aunque se esperaba que los eléctricos a baterías representaran el 11% de sus ventas para principios de 2024, finalmente se situarán entre el 8 y el 10%. Para hacer frente a esta situación, ya se han anunciado ajustes en la planta alemana de Zwickau, donde se ensamblan los ID.3, ID.4 e ID.5, así como los Audi Q4 e-tron y CUPRA Born.
Volkswagen señala que los pedidos han comenzado a aumentar en el tercer trimestre
A pesar de todo, Volkswagen se muestra positiva, ya que los pedidos han comenzado a aumentar durante el tercer trimestre, una tendencia que, de continuar en el cuarto trimestre, le permitiría salvar los muebles. Además, un portavoz afirma que los problemas en la cadena de suministro se están resolviendo, lo que ayudará a acortar los plazos de entrega.
Este no es el único problema al que se está enfrentando Volkswagen en la actualidad. En las últimas horas, la prensa alemana se ha hecho eco de la decisión de la cúpula de reestructurar por completo su división de software, Cariad. Entre otras cosas, se eliminarán hasta 2.000 puestos de trabajo de los 6.000 que tiene la unidad en todo el mundo. Los ajustes de plantilla comenzarán tan pronto como el año que viene.
Recordemos que, en los últimos tiempos, diversos proyectos clave para el grupo (principalmente el lanzamiento de las plataformas eléctricas PPE y SSP) han sufrido importantes retrasos debido a las dificultades experimentadas por Cariad en el desarrollo de las arquitecturas de software 1.2 y 2.0.
Fuente | Automobile Propre
