SEAT alerta de la necesidad de hacer que el coche eléctrico funcione: “No hay plan B”

La industria del automóvil tiene ante sí un reto crucial en su transición hacia la movilidad eléctrica. Así lo ha expresado Natalia Turón, secretaria general y directora de Estrategia Corporativa y Sostenibilidad de SEAT S.A., quien ha hecho un llamamiento a las administraciones para que refuercen su apoyo al coche eléctrico.

«Nosotros hemos hecho los deberes», ha señalado Turón, insistiendo en que es vital la colaboración público-privada para consolidar la electromovilidad. Y es que, en 2024, sólo el 5 % de los vehículos matriculados fueron totalmente eléctricos.

Un compromiso conjunto para la electrificación

En opinión de Natalia Turón, la transformación del sector no sólo depende de los fabricantes, sino también de medidas políticas y económicas que faciliten el proceso.

En enero de este año, SEAT firmó junto al Gobierno de España y las comunidades autónomas de Cataluña, Valencia y Navarra la ‘Declaración de Casa SEAT’, un acuerdo que busca agilizar la electrificación mediante iniciativas concretas.

Entre las medidas propuestas se encuentran la ampliación de la infraestructura de carga, la renovación de las flotas públicas con vehículos eléctricos y la concesión de incentivos directos a la compra de estos modelos.

Además, Turón ha resaltado la importancia de la comunicación para combatir mitos sobre la autonomía y el tiempo de recarga, así como para enfatizar el placer de conducción de los eléctricos.

«Debemos concienciar sobre las ventajas de los coches eléctricos y demostrar que son divertidos de conducir, así como desmentir los mitos que existen sobre su autonomía o el tiempo de recarga, entre otros», ha apuntado.

Un desafío en cifras

El coche eléctrico es clave para la sostenibilidad y la lucha por la descarbonización, pero además representa un cambio estratégico para la industria. Turón ha recordado que, considerando su ciclo de vida completo, los eléctricos pueden reducir hasta un 60 % las emisiones de dióxido de carbono (CO₂) en comparación con los modelos de combustión interna.

Pero, a pesar de estas ventajas, España avanza a un ritmo lento en la adopción de la electromovilidad. En 2024, únicamente el 11,4 % de las matriculaciones correspondieron a vehículos electrificados y apenas el 5 % fueron completamente eléctricos.

Son cifras muy alejadas de los objetivos europeos y, ante este panorama, Turón subraya la necesidad de medidas inmediatas: «para impulsar la electrificación, necesitamos un mayor apoyo por parte de las administraciones. “Es imprescindible tomar medidas concretas y coherentes ya, en Europa y sobre todo en España”, solicita la directiva española.

Inversión millonaria para una transformación sin vuelta atrás

Turón afirma que la apuesta de SEAT por la electrificación es contundente. La compañía ha destinado más de 3.000 millones de euros a la transformación de su planta de Martorell (Barcelona) y 300 millones adicionales para levantar una planta de ensamblaje de celdas de baterías. Asimismo, ha puesto en marcha un programa de formación de 500.000 horas para sus 14.000 empleados.

Turón lo tiene claro: «No hay plan B para la electrificación». SEAT se ha fijado el objetivo de que en 2030 el 100 % de los modelos CUPRA sean eléctricos, además de alcanzar la neutralidad de carbono en sus instalaciones para 2040 como paso previo a la descarbonización total en 2050.

La inversión del grupo automotriz español no acaba ahí, ya que junto al Grupo Volkswagen, PowerCo y otros socios, SEAT ha invertido 10.000 millones de euros en acciones como la electrificación de las fábricas de SEAT en Martorell y Volkswagen en Pamplona, ola construcción de una gigafactoría de celdas de baterías en Sagunt (Valencia).

El mensaje de SEAT es claro: la movilidad eléctrica es el futuro y no hay alternativa. Para que esta transición sea un éxito, es esencial un respaldo firme de las administraciones. Por tanto, sólo queda actuar con determinación para hacer del coche eléctrico una realidad accesible y sostenible.