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Baterías de litio y su cuidado

Tenemos que empezar a perderle el miedo a las baterías en general y en concreto a las de litio porque son mucho más seguras de lo que a muchos nos pueda parecer, solo hay que ver las muy pocas noticias de incendios de las mismas por no decir que la mayoría son provocados para probar hasta donde pueden llegar, y no solo eso si no que además su degradación es prácticamente nula si éstas son bien cuidadas y tratadas. De echo el tema de las baterías de litio es algo muy peculiar ya que podemos recargar en cualquier zona de carga en la que estemos, 30%, 55%, 89%, etc… sin problema alguno, las cargas parciales son sus aliadas.

¿ Pero cuales son estas medidas que hemos de tomar para la larga duración de las mismas ? os las contamos. Llevo haciendo pruebas con una batería de litio durante más de un año y los resultados que he podido obtener son más que sorprendentes, durante todo este tiempo solo ha perdido un 5% de su capacidad, incluso no llega a esta cifra, y se podrá pensar que esta pérdida en cierta medida podría ser algo desastroso, pero para nada porque se podría haber evitado y os cuento el porqué, la batería fue varias veces descargada a tope y sobrecargada durante la prueba en veces distintas.

Una batería de litio a diferencia de las ya menos utilizadas níquel metal hidruro no tiene problemas en ser recargadas infinidad de veces a carga parcial, pero hay cosas que sí tienen en común y estas cosas son la sobrecarga y el defecto de carga de las mismas o la pérdida de voltaje. Esto ya lo hacen de forma automática algunos fabricantes de vehículos eléctricos pero otros no por eso hemos de tener muy claro todo esto que os cuento, de vital importancia si queremos que nuestra tan valiosa batería de litio nos dure todo lo que nos tiene que durar.
En resumen, para que una batería de litio aguante correctamente su ciclo de vida en el vehículo o dispositivo en el que se disponga lo único que debemos hacer es mantenerla siempre entre unos márgenes concretos de carga, como por ejemplo podría ser entre un 20% y un 80%, en este margen de porcentaje tenemos un uso del 60% de la misma, como este margen a priori puede parecer poco podemos usar otros como por ejemplo entre 15% y un 95%, lo cual es algo más apurado pero que nos da un margen del 80% de uso de la misma.
Y nos podríamos preguntar porqué por debajo dejamos un 15% por encima solo un 5% para llegar al 100%, la explicación es muy sencilla, una batería de litio tolera mucho peor un defecto de voltaje en las células que un exceso, si dejamos una batería de litio descargada durante un tiempo corto podremos comprobar como la pérdida de capacidad es muchísimo mayor a si la dejamos cargada completamente, ojo!, son malas las dos cosas por eso hemos de evitar tanto las sobre cargas, intentar no alcanzar nunca el 100%, como lo contrario, nunca dejarla caer por debajo del 15%.
Aunque menos influyente pero no por eso menos importante dependiendo del tipo de tecnología usada para la fabricación, véase las buenas características de las de fosfato de litio, no debemos olvidarnos de la temperatura, de ahí que atendamos a hacer cargas parciales y no completas evitando así calentamientos innecesarios.
¡ Larga vida a nuestras baterías !.
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