Repaso a las ventas del Peugeot iOn y el Citroën C-Zero en Francia durante las ofertas de agosto

Durante el pasado mes de agosto, los fabricantes franceses Peugeot y Citroën han puesto en marcha agresivas campañas de descuentos destinadas a quitarse de encima unas cuantas unidades de sus modelos eléctricos, una acción forzada por las bajas ventas y la acumulación de stock que ha llevado por ejemplo, a Peugeot a aplicar descuentos de hasta el 65% del precio del iOn, lo que ha resultado que podíamos hacernos con una unidad por sólo 10.900 euros.

A esto sumamos las acciones de Citroën para desprenderse de parte de su stock acumulado mediante la puesta en marcha de programas de alquiler blandos, que permiten a los franceses llevarse una unidad del C-Zero durante dos años por apenas 90 euros al mes, sin cuotas iniciales ni finales, y que como era normal, ha resultado en una explosión de matriculaciones. Gracias a estas acciones, durante agosto los dos eléctricos se han colado en la lista de los más vendidos, y mientras que la tremenda oferta de Peugeot aupaba al iOn hasta el puesto número 55 de los más vendidos en Francia, el Citroën C-Zero llegaba a la 72.

Esto ha resultado en que en un sólo mes se han vendido más coches que en todo el año, y durante agosto Peugeot ha matriculado un total de 508 unidades, cuando hasta julio sólo había logrado entregar 198 unidades, lo que lleva el total acumulado hasta el mes de agosto hasta las 706  entregas. Por su parte Citroën a pesar de no ofrecer unas condiciones tan interesantes como las de Peugeot, ha logrado nada menos que matricular un total de 418 unidades en agosto, para un total en 2012 de 1.025 matriculaciones.

Esto nos indica que a pesar de sus limitaciones, la razón para que no se vendan más coches eléctricos es fundamentalmente su precio, y es que no sería necesario llegar a los extremos de Peugeot casi regalando el coche, algo a lo que no nos oponemos en absoluto, pero incluso con un precio de unos 15.000 euros después de las ayudas serviría a este modelo para despegar en cuanto a ventas, sobre todo por la escalada de los precios de los carburantes que este verano han llegado a alcanzar la barrera psicológica de los 2 euros el litro en Francia.

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