En el EVS27 hemos podido encontrarnos con nuestros amigos de Alfer. Durante este evento la histórica marca catalana renacida de la mano de las motos eléctricas, ha mostrado la última evolución de su moto de enduro, la Alfer EVX. Un modelo que ha evolucionado desde el pasado salón de Milán, y que está preparada para saltar al mercado.
Durante este evento, Alfer espera lograr captar la financiación necesaria para dar el último paso que les falta para poner sus motos a la venta. Un regreso por todo lo alto de un fabricante fuertemente ligado al mundo del offroad, que quiere retomar su andadura de la mano de una familia de motos eléctricas.
No solo de enduro vive el mercado. Conocedores de que la demanda también será importante en otros segmentos, Alfer prepara una oferta varidada. Esta permitirá crear un catálogo que contará tanto con la modo de enduro, como una moto de trial infantil, e incluso un scooter.
Pero el gran atractivo del stand de Alfer era su EVX. Una moto de enduro de verdad, que ya ha demostrado su potencial. Cuenta con un motor de 6 kW de potencia nominal y 18 kW (24,5 CV) que puede ser conducida con carné de coche. Además encontramos elementos fundamentales como el freno regenerativo, capaz de recuperar hasta un 15% de la energía perdida. Un elemento que podremos accionar mediante la maneta izquierda de una una forma extremadamente sencilla y eficaz.
Otra de las curiosidades del nuevo modelo es que podremos adaptar esta misma maneta izquierda, y convertirla en un falso embrague. Esto quiere decir que a pesar de no tener cambios, podremos simular el juego acelerador/embrague como en una moto convencional. Una fórmula pensada para los acérrimos de los cambios, y también otros usuarios como los trialeros que no se adaptan a moverse sin este elemento.
La energía por su parte procede de un pack de baterías de litio con 4 kWh de capacidad que le permite recorrer unos 100 kilómetros en ciclo urbano o una hora en offroad, algo menos si nos movemos a un ritmo fuerte por zonas sin asfalto, y algo más si realizamos una conducción eficiente.
Pero lo más interesante es que la Alfer estará fabricada en nuestro país. Un ejemplo de que la movilidad eléctrica nos puede dar una segunda oportunidad, y ser una nueva fuente de creación de puestos de trabajo.
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