Gracias en gran parte a ser el primer mercado del coche eléctrico en Europa, Noruega disfruta de la mejor oferta de todo el continente.
En total los noruegos pueden seleccionar casi 20 modelos diferentes, y además hacerlo con unos precios de lo más competitivos. Si esto no fuese poco, podemos añadir que los eléctricos de Renault, se venden todos con la batería en propiedad.
Otro dato interesante es la diferencia entre el Nissan LEAF, 27.697 euros, y el Toyota Prius, 34.289 euros. En total entre el híbrido y el eléctrico hay 6.592 euros a favor del eléctrico. Todo un ejemplo del porqué las ventas de coches eléctricos funcionan a pleno rendimiento en este mercado. Un mercado donde esta opción no sólo no es más cara, si no que es incluso más barata que las versiones con motor de combustión.
A lo que estos días donde muchos están rindiendo cuentas ante hacienda, podemos sumar que los noruegos no tienen ayudas directas a la compra. Por lo tanto, no tienen que preocuparse de devolver una parte. Lo han solucionado de una forma mucho más inteligente, con una exención de los impuestos aplicados a los turismos.
Por supuesto, sólo con el precio el coche eléctrico no habría logrado hacerse con el 20% de cuota de mercado. Una amplia infraestructura de recarga, además de otros muchos incentivos, carriles bus, ferrys gratis…etc etc, han convertido a los eléctricos en una realidad décadas antes de lo que será en otros países.
