En pocas semanas comenzará la distribución en mercados como California de la versión enchufable del Hyundai Sonata. Un modelo global del fabricante coreano que llega dotado de un sistema de propulsión muy interesante, pero que parece ha desembarcado algo tarde. O no.
A grandes rasgos el Hyundai Sonata PHEV no difiere demasiado de otras propuestas en este segmento. Un motor gasolina de 115 kW (156CV) que trabaja de forma conjunta con un motor eléctrico de 50 kW. En total el Sonata enchufable puede presumir de una potencia conjunta de 151 kW (205CV) que la convierten en una berlina muy dinámica.
Una de las peculiaridades de este sistema es que está controlado por una caja de cambios automática de 6 velocidades que forma parte de un sistema denominado «Transmission-Mounted Electrical Device (TMED). Este utiliza el propio motor eléctrico del sistema como transmisión en lugar del habitual convertidor de par, y que reduce las pérdidas habituales de este sistema.
Cuenta con posibilidad de moverse en modo eléctrico. De echo Hyundai indica que es el modo por defecto, y que gracias a una batería de 9.8 kWh, con celdas fabricadas por LG, le permite recorrer bajo el ciclo EPA un total de 38.6 kilómetros con cada carga. Una cifra que podemos comparar con los 17.7 kilómetros que logra el Toyota Prius Plug-In bajo el mismo ciclo, o los 32 kilómetros del Ford Fusion Energi.
Esto permite al Sonata convertirse en el híbrido enchufable con más autonomía del mercado bajo el ciclo EPA, exceptuando a los eléctricos con extensor de autonomía como el Chevrolet Volt o el BMW i3 Rex.
Al igual que el resto de híbridos enchufables, el Sonata PHEV también puede moverse en tres modos de conducción. Eléctrico, híbrido y Carga de batería.
En el primero podremos llevar el coche hasta una velocidad máxima de 121 km/h sólo con el impulso del motor eléctrico y la carga de las baterías. Un modo que permite a los usuarios poder realizar recorridos cortos en modo 100% eléctrico sin tener que reducir de forma drástica su velocidad.
En el modo híbrido los dos motores colaboran para lograr el mejor compromiso entre prestaciones y consumo. En el modo recarga, el motor gasolina pasa a convertirse en un generador, y se encarga de recargar la energía de las baterías con una tasa de un 10% de carga cada 10 minutos. Suficiente según Hyundai para recuperar la capacidad necesaria para moverse por la ciudad en modo eléctrico una vez regresemos de un viaje.
El resultado es una berlina aerodinámica, 0.24Cx, que mantiene una buena capacidad de carga a pesar de la instalación del pack de baterías, y que logra un consumo medio oficial de 2.5 litros a los 100 con la batería cargada, que sube hasta los 5.88 con esta vacía.
Un aviso muy serio para los fabricantes japoneses y americanos (aunque nos falta el precio) que han visto una muestra del potencial del Hyundai Sonata PHEV que no sería para nada descabellado verlo por nuestro mercado próximamente.
Fuente | Hyundai