Las ventas de coches eléctricos en Francia siguen creciendo de forma imparable, y entre enero y agosto se ha logrado superar las 10.000 unidades vendidas en este mercado. En total han sido 10.048 turismos, a los que hay que sumar otros 2.565 modelos industriales eléctricos.
Esto significa un crecimiento anual del 55%, con unos meses de verano, julio y agosto, donde a pesar de la tradicional caída de ventas estas se han incrementado un 82%.
Las razones de este crecimiento tan importante en los meses de verano son el resultado de la nueva política de incentivos del gobierno francés, que el pasado mes de abril aprobaba el conocido como Superbonus. Un incremento de la ayuda que añade otros 3.700 euros a los 6.300 que entrega el gobierno, y al que pueden acceder aquellos propietarios que entreguen un coche diésel matriculado antes de 2001 en el momento de la compra del eléctrico.
Gracias a estos 10.000 euros, son muchos los propietarios que se han convencido de dar el paso al coche eléctrico. Por modelos el Renault ZOE sigue siendo en líder indiscutible con 1.023 matriculaciones en julio-agosto, para un acumulado durante el año de 6.753 unidades.
El Nissan LEAF está en segundo puesto con 401 unidades, 1.826 en lo que llevamos de 2015, mientras que el Peugeot iOn se cuela en la tercera posición con 155 unidades, y 449 en el acumulado, gracias a las agresivas ofertas que el fabricante francés ha puesto en marcha este verano (155).
Esto permite a los coches eléctricos sumar en su conjunto un 0.8% de las matriculaciones en Francia. Algo que nos indica que con el impulso del otoño, posiblemente antes de final de año las ventas podrán superar la barrera psicológica del 1% de ventas de coches en Francia.
Vía | AVERE
