Es lo que tiene estar en el vagón de cola en cuanto a la apuesta por las nuevas formas de movilidad sostenible, que te cuesta dinero. Hablamos de FIAT, que se ha convertido en uno de los principales «benefactores» de fabricantes como Tesla. Todo gracias a la magia de los créditos de emisiones de Estados Unidos.[blocktext align=»left»]
El presidente de FIAT, pide a sus clientes que no compren el 500 eléctrico [/blocktext]
En este mercado el que contamina, paga. Pero no multas, si no derechos de emisiones que disponen los fabricantes más eficientes. En el caso de FIAT, que sólo cuenta con el 500e a la venta en mercados como California, ha tenido que invertir una buena suma de dinero en comprar 8.2 millones de megagramos (cada megagramo son 1.000 kilos) en créditos de emisiones a Tesla, Toyota , Honda y Nissan.
Desde la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos (EPA) no se ha publicado la cantidad que el grupo FCA (FIAT-Chrysler) ha tenido que desembolsar. Pero independientemente de la cifra, debe ser un dinero que debe doler de forma especial en un fabricante que a pesar de contar con capacidad económica e industrial de sobra, ha pasado por completo del mercado del coche eléctrico.
Uno de los principales beneficiados de este sistema es Tesla. El fabricante norteamericano ha logrado acumular un total de 413 millones de dólares en créditos de emisiones entre los años 2013 y 2014, siendo FIAT el destino de la mayor parte de los que han vendido.
De esta forma como vemos a pesar de todo, FIAT continúa invirtiendo en coches eléctricos, aunque sea en los de la competencia. Una política totalmente absurda que suponemos que en algún momento tendrá que cambiar si no quieren seguir sembrando el campo ajeno.
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Vía | Reuters
