La irrupción de los motores eléctricos en el sector de la aviación es una tendencia que a pesar de llevar años sobre la mesa, en los últimos meses ha logrado acelerar su presencia. La idea es ofrecer una alternativa a los vuelos cortos, y hacerlo con un sistema mucho más eficiente y económico que los modelos convencionales.
En estos momentos hay en marcha una carrera por ser los primeros en ofrecer este tipo de vuelos. La última en salir a la palestra ha sido na norteamericana Zunun Aero. Una compañía fundada en 2013 pero que esta pasada semana ha salido de la sombra para anunciar sus ambiciosos planes.
Estos contemplan poner en marcha su primera línea con aviones eléctricos en 2020. Una línea que permitirán conectar por ejemplo las ciudades de Atlanta y Washington, unos 1.100 kilómetros, y hacerlo además con unos billetes muy económicos, en torno a los 25 dólares por pasajero. En 2030 la conexión se extenderá para cubrir los 1.600 kilómetros que separan Los Angeles de Seattle. Y todo en pequeños aviones que tendrán capacidad para entre 10 y 50 pasajeros cada uno.[blocktext align=»center»]
Para los responsables de Solar Impulse, en menos de 10 años veremos aviones eléctricos de pasajeros [/blocktext]
Para lograrlo además del desarrollo de la tecnología de las baterías, Zunun usará motores de combustión para extender la autonomía. Una fórmula similar a la vista en el sector de la automoción. Gracias a esta combinación el coste operativo de los vuelo se reducirá entre un 40 y un 80%, mientras que las emisiones también se verán rebajadas en un 80%. A esto se añade el menor ruido que realizan los motores eléctricos, lo que sin duda será un rayo de esperanza para los que viven cerca de un aeropuerto.
Con esta solución explican sus promotores, se logrará además sacar mayor partido a los pequeños aeropuertos, la mayor parte de ellos con muy poco movimiento. La razón es que el 95% de los desplazamientos de menos de 700 kilómetros se realiza en coche. Para entre los 800 y los 1.200 kilómetros la tasa baja al 61%, y entre los 1.200 y los 1.600 kilómetros el 50% optan por el coche. Desplazamientos de los cuales una parte pueden ser absorbidos por los aviones impulsados por electricidad.
Por lo tanto con el uso de aviones eléctricos se lograrían vuelos más cercanos al destino de los usuarios. Pero los usuarios también disfrutarían de viajes más rápidos al no depender de los lentos controles de seguridad en los grandes aeropuertos, a lo que se suman los menores requisitos de las agencias a los aviones de pequeñas dimensiones.
Para los expertos aunque hay potencial, de momento estamos lejos de ver en marcha las líneas aéreas con aviones eléctricos. La razón principal está en las baterías que a pesar de su desarrollo, todavía no ofrecen una densidad energética suficiente como para lograr cumplir con los requisitos de un avión comercial.
Pero esto no ha impedido que el dinero haya comenzado a fluir a esta prometedora tecnología. Nombres como Boeing HorizonX, y JetBlue Technology Ventures han invertido en Zunum Aero, con el objetivo de seguir de cerca el desarrollo de una nueva forma de moverse que amenaza con revolucionar los desplazamientos medios en avión.
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Vía | SCMP
