Volkswagen aspira a adelantar a Tesla y ser líderes en el sector del coche eléctrico

Nadie duda del potencial económico, industrial y tecnológico de Volkswagen, que cuando quiera podría lanzarse de lleno al sector del coche eléctrico y hacerse con una buena parte de las ventas. Pero las declaraciones de sus directivos no están ayudando demasiado a este objetivo, al menos desde el punto de vista publicitario.

El mejor ejemplo son las últimas declaraciones del jefe de Volkswagen, Herbert Diess, que durante una conferencia en Alemania ha indicado que tienen la intención de ser líderes en el sector del coche eléctrico, y adelantar a Tesla.

Para lograrlo el Sr Diess ha indicado que «Volkswagen será capaz de sacar ventajas en la reducción de costes de cara a rentabilizar los modelos eléctricos, y lograr que estos tengan el mismo precio que los coches diésel actuales»

Lo más curioso son las cifras y los tiempos que maneja el Sr Diess. Según este, quieren ser líderes con 1 millón de coches eléctricos vendidos en 2025. Una cifra que choca con las comunicadas anteriormente, cuando se hablaba de entre 2 y 3 millones de unidades para esa fecha. Cifras que posiblemente indicaban a todo el grupo y a todas sus marcas (Audi, Volkswagen, SEAT, Skoda…)

Y es que la propia Tesla espera alcanzar una producción de 1 millón de unidades ya en 2020. Cinco años de la cifra marcada por el máximo responsable de Volkswagen…

Para el directivo de VW, el objetivo a corto plazo es el de lograr superar el bache del Dieselgate, y concentrarse hasta 2020 en la recuperación de la rentabilidad perdida por el escándalo de las emisiones. A partir de esa fecha pondrán todo su esfuerzo en el sector del coche eléctrico.

Esto supondrá casi tres años de ventaja para Tesla entre el arranque de sus proyectos más populares, y casi 8 años hasta lograr que el de Volkswagen alcance el millón de unidades al año. Una diferencia muy grande en un sector que se mueve a la velocidad de la luz, y donde la competitividad se medirá no sólo en los propios coches, sino en la producción de baterías, el desarrollo de tecnologías como la conducción autónoma, y la infraestructura de recarga.

Un sector donde dar tres años de ventaja a al competencia, puede salir muy caro.

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Vía | Fortune