Hace apenas unos días, Tesla dio un vuelco al mercado global de coches eléctricos con la presentación de los Model 3 Standard Range RWD y Standard Range Plus RWD, las dos versiones más económicas del modelo «pequeño» de la compañía. A esto habría que sumar la bajada de precios generalizada del resto de variantes, lo que ha tenido como consecuencia que la gama del Model 3 se ha convertido en una de las más interesantes del panorama por su relación entre precio y autonomía.
Así, el Model 3 Standard Range RWD parte de los 35.000 dólares con una autonomía de 354 km EPA, el Standard Range Plus RWD de los 37.000 dólares con 386 km EPA, el Mid Range RWD de los 40.000 dólares con 425 km EPA, y el Long Range RWD de los 43.000 dólares con 523 km EPA. Por encima nos encontramos con los Long Range Dual Motor (47.000 dólares, 499 km EPA) y Long Range Dual Motor Performance (58.000 dólares, 499 km EPA).
Esto ha dado a los compradores una nueva perspectiva de los precios de modelos como el Nissan LEAF, el Hyundai Kona Eléctrico, el KIA e-Niro o el Chevrolet Bolt, que en algunos acabados tienen precios más elevados que el sedán medio de Tesla a pesar de no ofrecer unas prestaciones o una autonomía verdaderamente superiores.
Si bien Hyundai o Nissan por el momento no parecen ir a modificar su hoja de ruta, en General Motors los concesionarios están comenzando a tomar medidas frente al modelo más económico de Tesla, ajustando los precios del Chevrolet Bolt (383 km EPA) para que resulte más competitivo. Recordemos que en Estados Unidos los concesionarios tienen una gran libertad a la hora de ajustar precios, por lo que la política de cada distribuidor es única.
Con todo, se están dando numerosos casos de concesionarios Chevrolet que desde el anuncio del lanzamiento del Tesla Model 3 Standard Range han comenzado a ofrecer rebajas muy similares en el único modelo eléctrico de la gama: por ejemplo, en el estado de Oregón los concesionarios locales han bajado de golpe los precios de los Bolt en hasta 7.000 dólares, una rebaja muy significativa que afecta a los modelos más equipados y que permite llevarse un Bolt tope de gama por debajo del precio de uno básico, lo que nos hace pensar que el margen de beneficio por unidad de las versiones superiores es muy elevado (algo necesario para compensar la baja producción del modelo).
¿Realizarán el resto de marcas movimientos similares para ajustar el precio de sus coches eléctricos a corto plazo? Si bien esto parece una posibilidad remota en compañías como Hyundai, que apenas da a basto con la demanda actual debido a los cuellos de botella en la producción de sus coches eléctricos, no deberíamos descartar una próxima bajada de precios en el Nissan LEAF, que está viendo sus ventas disminuir de forma notable en mercados como Japón o Estados Unidos.
Fuente | InsideEVs