Más allá del Brexit, existen otros temas en los que pensar para asegurar el futuro del Reino Unido en las próximas décadas. El Comité por el cambio climático (CCC) ha dejado claro que el Reino Unido debería de tener claro su objetivo de eliminar las emisiones de efecto invernadero para el año 2050. Si lo consiguen, esto significaría el fin de la contribución del país al calentamiento global. El gobierno está considerando este nuevo informe, aunque los expertos creen que seguramente terminen adoptando las recomendaciones pertinentes. Aunque hay grupos de activistas que han protestado para que este objetivo se cumpliera para el año 2025, la ciencia y el sentido común han dictado un cumplimiento más realista para el año 2050. Poniendo este plan en contexto, se pretende una bajada de las emisiones del 80% por debajo de los niveles del año 1990.
Este plan no contempla la compraventa de créditos de contaminación a otros países para alcanzar los objetivos prometidos como se ha hecho en otras ocasiones, y se compara con los objetivos anunciados por Noruega y Suecia, para los años 2030 y 2045 respectivamente. Habrá varias formas por las que se llegará a esta huella neutral, y una de ellas será el uso de los coches eléctricos. Para antes del año 2040 todos los coches que se vendan en el Reino Unido tendrán que ser eléctricos. Mientras que el gobierno pretende prohibir los coches diésel y gasolina para el 2030.
Aunque el plan ha tenido en cuenta la tecnología actual para poder llevarse a cabo, también se ha proyectado la ventaja de que para el año 2050 se espera que la tecnología de las baterías y su coste de producción, hayan mejorado con respecto a la actualidad, lo que sin duda permitirá una mayor proliferación de coches eléctricos en las calles al ser más asequible su adquisición.
No solo de coches eléctricos vivirá el nuevo plan de contaminación, los británicos tendrán que comer un 20% menos de carne de ternera y cordero, además de productos lácteos para poder cumplir el objetivo fijado. También se pondrá en marcha un programa de plantación de árboles para fijar CO2 y una nueva industria que capture y almacene CO2 bajo el Mar del Norte. Se estima que estas medidas podrían reducir las emisiones en un 95% para el año 2050.
Desde el Comité por el cambio climático parecen bastante convencidos de poder conseguir los objetivos marcados; «Esto no es algo que esperamos que ocurra. Podemos hacerlos, y si no lo hacemos significará que hemos elegido no hacerlo.»
Fuente: House of Commons Library
