Con motivo del Goodwood Festival of Speed que se está celebrando durante este fin de semana, los responsables de la nueva competición off-road Extreme E, han querido mostrar por primera vez el que será el coche utilizado en esta categoría eléctrica.
El Odyssey 21 es un vehículo todoterreno eléctrico del estilo de los que se utilizan en competiciones como el Dakar. Este coche de competición off-road cuenta con una potencia máxima de 550 CV (400 kW) y pesa 1.650 kg. Mide 2,3 metros de ancho y es capaz de despachar el 0 a 100 km/h en 4,5 segundos en pendientes de hasta un 30%.
El coche es fabricado bajo un paquete común de partes producidas por Spark Racing Technology y equipa una batería de Williams Advanced Engineering. El Odyssey 21 cuenta con un chasis reforzado de aleación de acero tubular, sin olvidar mencionar la disponibilidad de una jaula antivuelco para aumentar la seguridad de los ocupantes cuando van al máximo en las carreras. Los neumáticos los proporciona la marca Continental.
A partir de este coche común, los diferentes equipos podrán probar y desarrollar sus propios motores eléctricos y algunas partes de la carrocería como la cubierta del motor, los paragolpes delantero y trasero, los faldones laterales y las luces, con el fin de que el coche final pueda parecerse estéticamente a los coches de calle.
Por primera vez el Odyssey 21 apareció ante el público y realizó la subida de Goodwood en su pequeño trazado. Un hecho de bastante importancia si tenemos en cuenta que este prototipo se completó la semana pasada en la planta de producción de Spark en Francia.
La competición eléctrica Extreme E ha sido fundada por el CEO y fundador de la Fórmula E, el español Alejandro Agag y compartió su emoción por esta nueva competición: «El Extreme E-SUV Odyssey 21 es algo nunca antes visto en el deporte del motor. La tecnología puntera de nuestros colaboradores que han utilizado en su diseño y construcción han resultado en un coche impresionante, capaz de producir un alto rendimiento en las situaciones más duras y los entornos más variados del planeta.»
Los organizadores buscan con este evento poner sobre la mesa los problemas que la mano del hombre está provocando en lugares tan sensibles como el Ártico, Himalaya, la selva amazónica y Alaska, a donde llevarán sus potentes todoterrenos eléctricos para dar visibilidad a los graves problemas medioambientales que sufre el planeta.
En septiembre arrancará el periodo de pruebas del Odyssey 21, continuando con la entrega de los 12 coches por parte de Spark Racing Technology a partir de marzo de 2020. Las pruebas continuarán en forma de grupo de los 12 coches a mediados del año que viene, que será cuando todos embarquen en el barco RMS St. Helena, para posteriormente comenzar la primera carrera de esta categoría a principios del año 2021.
