¿Quieres estar informado diariamente con las últimas novedades del mundo del motor?

Ahora no Permitir

Desarrollan un Tesla Model 3 con un extensor de autonomía y 1.000 kilómetros de alcance

Las posibilidades de adaptación de los coches eléctricos sólo está limitado por la imaginación, y el presupuesto. Como ejemplo un trabajo que nos llega desde la empresa de ingeniería austríaca Obrist Powertrain, que han desarrollado el primer Tesla Model 3 dotado de un extensor de autonomía a gasolina.

Lo que han hecho es coger un Model 3 Standard Range Plus, con su batería de 50 kWh y formada por celdas 21700, y la han sustituido por un pequeño pack de 17.3 kWh formada por celdas 18650. Un cambio que defienden por su reducción de peso respecto al original dejando el peso de las baterías en apenas 98 kilos, casi cuatro veces menos de lo que se estima pesa el pack original. Una batería que permite a este Model 3 recorrer 96 kilómetros reales con cada carga.

Para ampliarla han instalado un motor gasolina de dos cilindros que se ha ubicado en la parte frontal donde el Tesla tiene el maletero delantero. Un pequeño generador de 40 kW que hace las funciones de extensor de autonomía al estilo de lo visto en propuestas como el BMW i3. Según sus desarrolladores, gracias a limitar su trabajo a alimentar la batería, este motor puede funcionar a un régimen constante lo que ayuda a elevar su eficiencia hasta el 40%. Muy superior a una configuración donde tenga que impulsar las ruedas, lo que le permite lograr operar con un consumo de apenas 2 litros a los 100 km. Un motor que entra en funcionamiento cuando el coche supera los 65 km/h, y que permite recargar la batería con una potencia reducida, y además no deja que el nivel de carga baje hasta cifras peligrosas, lo que en la práctica sus creadores indican que alarga la vida útil de la propia batería.

El resultado es un Model 3 con una autonomía que entre su pequeña batería, y su motor gasolina, pasa de los apenas 400 km WLTP de la versión Standard Range Plus, a los 1.000 kilómetros que sus desolladores dicen que puede lograr alcanzar entre su nuevo pack y su motor gasolina que se alimenta de un depósito que ronda los 20 litros de capacidad. Un modelo que ya cuenta con un prototipo en fase de pruebas por las carreteras alemanas, y con otro preparándose para hacerlo.

Según sus diseñadores, esta extraña configuración tiene su explicación en la cuestión de los costes, y es que añadir el pack de baterías supone un coste de 2.000 euros, mientras que el motor gasolina tiene un coste de 1.200 euros. En total apenas 3.200 euros de coste de materiales para la conversión, pero donde no indican el precio de la mano de obra.

Eso si, aquellos interesados en lanzarse a esta verdadera locura, tendrán que esperar todavía un par de años ya que hasta 2022 o 2023 no lo tendrán listo para comenzar su comercialización.

Un verdadero despropósito a primera vista por el modelo seleccionado para realizar la conversión, que suponemos ha sido seleccionado por el impacto publicitario extra que ofrece usar el modelo americano. Pero un desarrollo que puede tener un interesante fondo al poner sobre la mesa las posibilidades de mejora de futuro para aquellos coches eléctricos que vayan perdiendo autonomía con el paso de los kilómetros, y que como vemos no tendrán muchas dificultades técnicas ni tampoco costes desmesurados para actualizar su batería, e incluso añadir accesorios como el extensor de autonomía.

Relacionadas | Se compra un Tesla Model 3 Long Range de desguace por 17.000 dólares, y lo repara con 6.000 dólares en piezas

Fuente | OBbrist-powertrain

Compártelo: Compartir en WhatsApp Compartir en Menéame