De acuerdo con Financial Times, Nissan está estudiando una serie de planes de contingencia para una posible separación de Renault. Fuentes familiarizadas con el asunto señalan que Nissan estaría intentando llevar a cabo una división total de ingeniería y fabricación, así como realizar una serie de cambios en su propia junta directiva.
Aparentemente este plan se debería a las tensiones surgidas en el seno de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi tras la huida de Carlos Ghosn, su antiguo director ejecutivo, de Japón: de acuerdo con el directivo, Nissan y las autoridades japonesas la tendieron una trampa para frenar la fusión total entre Renault y Nissan aprovechándose de las pocas garantías que ofrece el sistema penal nipón (99,4% de sentencias condenatorias).
Ghosn, que continúa defendiendo su inocencia desde Líbano frente a unas autoridades japonesas que le acusan de varios delitos fiscales, afirma que la Alianza no sobrevivirá a la situación actual. Lo cierto es que a pesar de los esfuerzos realizados por la cúpula de Renault, Nissan no parece interesada en reparar los lazos con su socia, habiéndose vuelto las relaciones entre ambos fabricantes disfuncionales.
Con todo, no parece muy factible que se vaya a producir esta separación: Renault posee el 43,4% de Nissan, la cual a su vez solo posee un 15% de Renault y no cuenta con los fondos suficientes como para comprar a su aliada francesa su porcentaje. Además, la marca japonesa lleva dos años acumulando bajadas en ventas y unas ganancias cada vez menores, lo que está llevando a la compañía al borde del abismo.
Es interesante recordar que Nissan estaba a punto de desaparecer cuando en 1999 Renault compró un porcentaje de la empresa, formando la Alianza Renault-Nissan. Este movimiento fue orquestado de hecho por el propio Carlos Ghosn. Ahora todo parece indicar que Nissan se acerca a una nueva crisis, algo a lo que no ayudan sus disputas con Renault.
Actualmente la Alianza es el mayor productor de coches eléctricos del mundo, con modelos de éxito como el Nissan LEAF, el Renault ZOE o el Mitsubishi i-MiEV entre sus filas. Además, gracias a la plataforma modular CMF-EV (desarrollada conjuntamente por la Alianza), los próximos modelos eléctricos del grupo deberían compartir la inmensa mayoría de sus componentes.
Fuente | Bloomberg
Relacionadas | Nissan presenta su avanzado sistema de tracción total eléctrica «e-4ORCE», que estrenará el Ariya