Para muchos analistas, la actual situación de Tesla es sorprendente en muchos aspectos, desde el valor bursátil, hasta la estrategia de invertir cero euros en publicidad. Algo que choca con un mercado donde las marcas pelean ferozmente por hacerse un hueco en los diferentes medios y redes sociales para llevar a su público las últimas novedades. Pero la pregunta es Tesla podrá mantener este privilegio para siempre.
Según los datos publicados por el portal Stadista, mientras que los de Elon Musk no gastan prácticamente nada en publicidad, otras marcas llegan a cifras muy elevadas por unidad.
Por ejemplo, tenemos a Genesis, la división de lujo de Hyundai, que según las estimaciones solo en Estados Unidos realiza un gasto por vehículo de 2.057 dólares. Le sigue muy de cerca Lilcoln, propiedad de Ford, con 1.911 dólares por unidad, y Jaguar, con 1.542 dólares.
Como vemos, el listado está protagonizado en sus primeros puestos por marcas premium, que cuentan con un mayor margen y pueden permitirse un mayor gasto en este aspecto. Por otro lado marcas como BMW apenas gastan 202 dólares por unidad vendida, y Honda 196 dólares.
En el caso de BMW, si tenemos en cuenta que en 2019 vendieron 324.826 unidades en Estados Unidos, esto nos daría un gasto en publicidad en el mercado americano de 65.6 millones de dólares en publicidad el pasado año en ese mercado. Una cifra que no parece demasiado elevada.
La cuestión es que en estos momentos Tesla puede permitirse el mantener a cero su marcador en gasto publicitario gracias al efecto novedad y la poca competencia que tiene. Podemos añadir la impagable campaña que hace Elon Musk desde su cuenta de Twitter, y el efecto que tiene cada tweet en los medios,y también las sinergias que logra con su otra compañía, SpaceX, con la que ha completado una de las campañas publicitarias más exitosas de la historia con el lanzamiento de su Roadster al espacio. Un lanzamiento que por otro lado no sabemos qué coste ha tenido, y quién lo ha pagado.
Pero Tesla está en una frenética fase de crecimiento con la puesta en marcha en 2020 de la fábrica de Shanghái, a la que en 2021 se sumarán las de Berlín y Texas. En total a finales del próximo año Tesla tendrá cuatro fábricas de vehículos en funcionamiento.
Esto llevará su capacidad de producción a unas cifras muy superiores a las actuales, con una capacidad anual estimada de entre 600.00 y 700.000 unidades en 2021, y que seguirá creciendo hasta superar el millón de unidades anuales en 2024.
Al mismo tiempo que Tesla crece, la competencia desplegará sus nuevas propuestas lo que supondrá que habrá un mercado cada vez más competitivo donde los clientes tendrán ante si más posibilidades de elección, todo en un sector con modelos con una autonomía cada vez más amplia, y una red de recarga también cada vez más extensa.
Un escenario donde Tesla tendrá que colocar un número cada vez más grande de vehículos cada año, y enfrentarse a una competencia cada vez más competitiva. Algo que irremediablemente hará que la venta de cada unidad sea más difícil.
Si empresas con la cuota de mercado e ingresos como Amazon y Apple gastan ingentes cantidades de dinero en publicidad, la pregunta es si Tesla tendrá que cambiar de estrategia o podrá seguir con el modelo actual.
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