La IA de Tesla decidirá la marcha a utilizar, el uso de intermitentes y cuándo conectar el Autopilot en los nuevos Model S y Model X
7 min. lectura
Publicado: 28/01/2021 16:57
Uno de los puntos de fuerza del diseño del nuevo interior presentado por Tesla para sus modelos tope de gama de los que FCE ha realizado una detallada cobertura, viene dado por un volante que rompe con los cánones tradicionales para los vehículos de alta gama, no pertenecientes al segmento de los deportivos extremos, a los que se incorpora una Inteligencia Artificial (IA) que asumirá ciertos actos reservados anteriormente al usuario.
La reinterpretación de la vida interior a bordo de los nuevos Model S y Model X pasa no sólo por su renovado salpicadero que incorpora una pantalla en formato horizontal, pensada para disfrutar de los contenidos multimedia como Netflix, Twitch, o videojuegos, poco afines al formato vertical que protagonizó a las primeras series de sendos modelos.
Ahora el nuevo volante tipo monoplaza de competición, representa un paso más en la automatización de los elementos de la conducción y la forma de interactuar con las funciones del automóvil por parte del conductor.
Redondos, hexagonales, achatados, los volantes se han presentado de diferentes formas a lo largo de los más de cien años de historia del automóvil. Este elemento que ha sido tradicionalmente redondo, está variando en sus formas como hemos vistorecientemente en el caso del Peugeot e-208 probado por FCE, o en el futuro BMW iX que propondrá una forma hexagonal en un volante que recuerda al utilizado por el Austin Allegro de los 70.
No sólo un nuevo volante
El nuevo volante de Tesla no es un simple ejercicio de estilo sino toda una declaración de intenciones respecto al futuro de la conducción, que cada día se automatiza un poco más a medida que el coche eléctrico y digital asume funciones reservadas antaño al conductor.
La falta del aro superior del volante de los Model S y Model X representa el primer paso a la desaparición del elemento clave de la conducción de un vehículo automóvil que, con la llegada de la conducción autónoma Nievl 5, perderá este elemento para siempre.
Tras la renovación del interior de la gama alta de Tesla, toda la columna de dirección ha sufrido un cambio tan importante que ha perdido los tradicionales y esenciales comandos de intermitencia y la selección de la marcha a usar, en el caso de los coches eléctricos: Parada, marcha atrás, neutro y marcha (P R N D).
En el caso de Tesla la selección del comando de velocidad es similar al usado por Mercedes y muchos fabricantes estadounidenses, que utilizan la palanca derecha de la columna de dirección para seleccionar el modo de marcha.
La ausencia absoluta de palancas o levas hace que la intuitiva acción de poner el intermitente, accionar las luces, poner en marcha los limpiaparabrisas, o seleccionar la marcha atrás cambie por completo para el usuario.
Una IA decidirá por el conductor
Según unos documentos internos de Tesla a los que el portal americano Electrek ha tenido acceso, un sistema de Inteligencia Artificial (IA) determinará en cada momento el modo de conducción que debe emplear el coche.
Los documentos filtrados indican que “el vehículo utiliza sus sensores del Autopilot para determinar de forma inteligente y automática los modos de conducción previstos y seleccionarlos. Por ejemplo, si la parte delantera del Model S / X está frente a la pared de un garaje, lo detectará y cambiará automáticamente a Marcha Atrás una vez que el conductor presione el pedal del freno. Esto elimina un paso más para los conductores de los autos de producción más inteligentes del mundo«.
De la misma forma, la IA de Tesla se®á la encargada de activar los intermitentes para indicar un cambio de carril o un giro o, incluso, activar el Autopilot de forma totalmente automática.
Con este movimiento Tesla pretende automatizar cada vez más funciones de la conducción llevando más allá la decisión por parte del vehículo de la activación de las diferentes funciones, del mismo modo que en la actualidad pocas personas a bordo de los coches más modernos se preocupan de encender las luces de cruce, puesto que los sistemas automáticos del vehículo se encargan de encender o apagar las luces en función de la luminosidad exterior, así como de activar los limpiaparabrisas cuando llueve.
El volante de los Tesla Model S y Model X, cuenta en su nueva versión de botones hápticos con las funciones de intermitentes y ráfagas de luces, en la parte izquierda. En la parte derecha nos encontramos con el claxon, control de crucero, limpiaparabrisas y activación del reconocimiento de voz.
A ambos lados del volante se retoman los botones multipropósito de los Model 3 e Y, que permiten diferentes interacciones con las funciones del coche.
Diferenciación a base de tecnología
Con sus dos buques insignia renovados, más por dentro que por fuera, Tesla vuelve a dar un paso adelante en materia de automatización y tecnología para marcar diferencias, no sólo estéticas, en un segmento donde está creciendo la competencia a medida que los fabricantes tradicionales sacan nuevos modelos de representación.
La capacidad tecnológica de la marca dirigida pro Elon Musk, será uno de los puntos esenciales para diferenciar sus productos del resto de modelos recién llegados y que pronto se sumaran a un segmento del mercado muy apetecible para las marcas.
Tesla define a su nuevo y futurista volante como un elemento que permita la «máxima concentración en la conducción: sin palancas, sin cambios de marchas El Model S es el mejor vehículo para conducir, y el mejor coche para ser conducido». Para todo lo demás podremos contar con la IA.