Poco a poco los grandes parques de baterías están comenzando a mostrar el potencial que tienen para servir de respaldo y regulación de la red eléctrica, y como complemente perfecto para cubrir la intermitencia de las energías renovables. Ahora desde Australia nos llega un ejemplo práctico de un enorme parque que ha realizado por primera vez una descarga completa de su batería.
Se trata de la » Vic Big Battery» situada en el estado de Victoria, y que está formada por packs de Tesla. Una instalación de 300 MW de potencia y 450 MWh de capacidad, que esta semana ha logrado por primera vez realizar una descarga completa de su potencia y capacidad.
A pesar de esto, la operación ha sido un test para conocer si el grupo de baterías era capaz de alcanzar su máximo rendimiento en potencia y capacidad, ya que su uso normal será menos exigente ocupándose de cubrir los picos de demanda durante momentos puntuales, así como trabajar en los mercados de arbitraje y control de frecuencia.
Esto supondría en el caso de aplicar sus capacidades al consumo medio de España, que es según REE eléctrica de 9 kWh al día de media, que esta batería podría cubrir las necesidades de unos 50.000 hogares durante 24 horas.
Por supuesto, como hemos visto esta batería no tendrá como objetivo el cubrir las necesidades de la red en tu totalidad, sino que su trabajo se dividirá para atender los picos de demanda y el control de frecuencia.
Pero si podemos hacer una estimación de potencial impacto en una red en una aplicación más real que el de alimentar decenas de miles de viviendas durante 24 horas. Por ejemplo, podríamos pensar en su principal aporte que sería el de inyectar energía a la red durante las horas de mayor coste y consumo, una energía almacenada de sobrantes de renovables de mucho menor coste. Algo que tendría como consecuencia un abaratamiento de la energía.
La cuestión es que 24 horas no es un funcionamiento realista ni en los casos más optimistas, ya que durante buena parte del día se puede aprovechar la energía procedente de las renovables y otras energías, momento en el que se cargaría la propia batería. En este caso una batería de estas características podría alimentar el consumo pico de 75.000 hogares españoles durante 90 minutos, teniendo en cuenta la potencia media contratada en España de 4 kW.
Por supuesto podríamos lanzarnos a hacer una estimación de la cobertura de esta instalación en periodo de tiempo más o menos largo, que nos daría un número de viviendas mayor. Pero es muy difícil estimar cuántas viviendas podrá alimentar un sistema de baterías ya que el consumo no es lineal y sufre muchas variaciones a lo largo de la jornada.
Pero lo que si está claro es que las baterías pueden ser una alternativa viable de respaldo incluso para importantes cantidades de población. En este caso a pesar de que hablamos de una única instalación, que se suma a las ya en marcha en el sur de Australia de Victoria, y que logran una potencia instalada de algo menos de 1 GW y una capacidad de poco más de 1 GWh, pero a las que próximamente se añadirán nuevos proyectos ya licitados que añadirán otros 28 GW.
Algo que nos da cuenta de la apuesta decidida de Australia con las baterías para reducir su elevado consumo de carbón y dar más protagonismo a las renovables.