Desde hace años, California se ha lanzado a buscar una solución a su enorme dependencia energética del gas para la producción eléctrica. Un movimiento que busca reducir también el impacto ambiental de un combustible con graves problemas de fugas. Para ello, el despliegue de renovables ha visto disparadas sus cifras, pero también se ha apostado por la instalación de baterías. Unas baterías estacionarias que han logrado el hito de superar brevemente la aportación de las centrales nucleares en el estado.
Y es que las empresas eléctricas han comprobado los muchos beneficios económicos que ofrecerán unas baterías que además de acumular los excedentes de la gran cantidad de energía solar instalada en su territorio, ayudan a regular una red con muchos años a su espalda en determinados lugares.
Si echamos un vistazo a la aplicación de la generación eléctrica en California, podemos ver por ejemplo que en los últimos días la aportación de las baterías ha llegado a un pico de 2.436 MW, superando la línea plana de la nuclear que aporta de forma constante 2.260 MW.
Es como decimos una «victoria» muy pequeña y se trata más de un evento con un componente simbólico, pero que demuestra que la tecnología de las baterías puede ser una alternativa para cubrir la oferta de las renovables cuando estas dejen de aportar.
Eso si, serán necesarias grandes inversiones para lograr que las baterías logren cubrir parte de la producción que en el caso de California está protagonizada principalmente por el gas natural, que representa en 36.8% de la producción, y que llega a picos de 23.000 MW.
Por su parte las renovables van creciendo poco a poco, y ya suponen el 20.7% de la producción, logrando ayer una potencia máxima de 16.900 MW.
En el caso de California, unas renovables donde la solar fotovoltaica es la gran protagonista, y que como podemos ver, comienza su reducción de producción cuando el sol inicia su descenso entre las cinco y las seis de la tarde.
Una reducción que es cubierta parcialmente por unas baterías que terminan su fase de carga a eso de las 12 de la mañana, y que logran su aportación pico entre las siete y las ocho de la tarde. Momento donde las renovables caen con fuerza y entra el consumo residencial de las noches.
Se trata de cifras todavía pequeñas, pero para el regulador eléctrico de California muestran el potencial de las baterías para reducir los periodos de precio más elevados usando energía acumulada en los momentos más económicos.
Una solución rentable que está recibiendo grandes inversiones de las empresas eléctricas que ya trabajan en proyectos del orden de los GW, y que en 2021 ha visto como las nuevas instalaciones lograban picos de 1.4 MW de respaldo por baterías. Una tendencia que como podemos ver, no ha hecho más que comenzar y que con las nuevas instalaciones se aumentará e potencia y em tiempo de apoyo.