A pesar de la enorme popularidad de la que gozaron durante años, de un tiempo a esta parte los monovolúmenes han pasado a ser una opción cada vez más marginal en el mercado. Esto se explica en gran medida por el auge de los SUV, que los han eclipsado por completo debido principalmente a su estética, menos familiar y más «aventurera».
A pesar de ello, todavía quedan clientes que demandan vehículos más prácticos que un todocamino. Por este motivo, las marcas han ido refinando cada vez más sus furgonetas, cuyas versiones de pasajeros (ludospace) se han convertido en herederas directas de los monovolúmenes, pues poco tienen ya que ver con los espartanos vehículos comerciales de hace unas décadas.
Este es el caso del Opel Zafira, que tras tres generaciones como monovolumen, se ha convertido en la versión turismo del furgón Vivaro. Rebautizada como Zafira Life, esta furgoneta está disponible con motorizaciones 100% eléctricas (Zafira-e Life), compartiendo tren de propulsión con sus hermanas del grupo Stellantis (Citroën ë-Jumpy/ë-SpaceTourer, FIAT E-Scudo/E-Ulysse, Peugeot e-Expert/e-Traveller).
La Opel Zafira-e Life está disponible con dos baterías (50 y 75 kWh) capaces de proporcionarle entre 230 y 330 km WLTP de autonomía. Ambos packs están asociados a un motor de 136 CV (100 kW) y 260 Nm. De serie, puede cargar a un máximo de 100 kW de potencia en corriente continua, tardando entre 30 (batería de 50 kWh) y 45 minutos (batería de 75 kWh) en recuperar el 80% de su alcance.
La Opel Zafira-e Crosscamp Flex equipa una batería de 75 kWh
Ahora, Opel ha decidido ampliar la gama de su furgoneta eléctrica con la llegada de una versión camper denominada Crosscamp Flex. Este modelo tan especial debutará como prototipo durante el próximo Salón de la Caravana de Düsseldorf, que se celebrará del 26 de agosto al 4 de septiembre. Como su nombre bien indica, la transformación correrá a cargo de la empresa Crosscamp.
La Opel Zafira-e Crosscamp Flex equipará el pack de 75 kWh; además, dispondrá de una batería auxiliar a bordo de 95 Ah que le permitirá reservar la energía de la batería de tracción para la conducción, encargándose de proporcionar electricidad al sistema de iluminación, la nevera y la toma USB para la carga de dispositivos.
Entre otras cosas, contará con unos asientos delanteros capaces de girar 180 grados, un mueble de cocina con lavabo, cocina de gas, armarios empotrados y contenedores para el agua potable y las aguas residuales… El asiento trasero se podrá convertir en una cama doble, a la que tendríamos que sumar otras dos camas situadas bajo el techo sobreelevado. El modelo eléctrico se unirá a las versiones Crosscamp con mecánica diésel el año que viene.
