Uno de los proveedores de referencia, Bosch, está decidido a explotar la vía del hidrógeno en los vehículos comerciales junto a ABT, especialmente para aplicaciones donde tener mucha autonomía y un repostaje corto son fundamentales. Vamos, condiciones de uso de motor diésel. Un par de furgonetas convertidas ya se están probando en carretera y las primeras conclusiones son interesantes.
Bosch Engineering GmbH y ABT eLine GmbH han partido de un vehículo ya disponible en el mercado, Volkswagen e-Crafter, al que se ha incluido todo lo necesario para funcionar con hidrógeno. Las baterías de fábrica fueron retiradas y se aprovechó el hueco resultante para colocar cinco tanques de hidrógeno, con una capacidad de algo más de 10 kg en total.
Además, colocaron la pila de combustible, sistema de alimentación de hidrógeno, válvulas, sensores, adaptaciones del sistema eléctrico… hasta el último detalle. El motor eléctrico no cambia, y dispone de una batería más pequeña. Como siempre, la pila de combustible hace de extensor de autonomía de dicha batería, ya que la pila funciona bien con un ritmo constante y no con demanda variable. Por eso se usa una batería como colchón en vez de alimentar el motor con la pila directamente.
Las características técnicas de los dos prototipos no se han comunicado. Lo único que sabemos es que incluso cargadas a tope pueden hacer hasta 540 kilómetros con 10 kg de hidrógeno, y que el repostaje lleva apenas 6 minutos. Por omisión entendemos que repostan a 700 bares de presión, ya que con el estándar anterior (350 bares) cabe la mitad de hidrógeno.
Esta fase del desarrollo en carretera viene después de haber probado en bancos el resto de los componentes. Ahora toca una extensiva recopilación de datos para mejorar el conocimiento necesario para perfilar el producto y acercarlo a la producción en serie. Al menos para camiones el objetivo es lograr la misma economía que utilizando motores diésel, en furgonetas debería ser algo similar. El hidrógeno se considera un complemento de las furgonetas a baterías, más apto para la larga distancia.
Los vehículos estarán a la vista en el IAA de Hanover de vehículos comerciales a partir del lunes. En Alemania la infraestructura de hidrógeno está más desarrollada que en otros países europeos y el sector público ha dado un mayor apoyo. Sin embargo, hacen falta esfuerzos no solo para que haya sitios para repostar, sino que el hidrógeno venga de fuentes 100% renovables (verde), lo cual le dará viabilidad a este combustible alternativo, dicen.
