El comisionado de Mercado Interno de la UE anima a los fabricantes a seguir produciendo coches térmicos
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Publicado: 07/11/2022 13:10
El comisionado de Mercado Interno de la Unión Europea, Thierry Breton, cree que la transición acelerada de la industria al coche eléctrico podría conllevar numerosos problemas, incluyendo pérdidas de empleo y automóviles menos asequibles. Por ello, ha instado a los fabricantes a que sigan produciendo coches con motor de combustión interna.
La Unión Europea quiere prohibir la venta de automóviles térmicos nuevos a partir del año 2035, lo que en la práctica supondría la desaparición no solo de los modelos gasolina y diésel, sino también de los híbridos y los híbridos enchufables. De acuerdo con Breton, esto podría traducirse en la desaparición de aproximadamente 600.000 puestos de trabajo.
El comisionado planea crear un grupo de trabajo con los fabricantes, con los que se reunirá regularmente durante los próximos cuatro años (el acuerdo alcanzado por la Unión Europea incluye una cláusula de revisión, por lo que en 2026 las autoridades podrían posponer la fecha de la prohibición).
«Respeto el hecho de que algunos estén decidiendo acelerar hacia una oferta 100% eléctrica, pero también animo a los fabricantes a seguir produciendo automóviles de combustión interna y generando empleos de calidad para seguir siendo una fuerza exportadora. No debe haber ningún tabú en la reunión de 2026″.
Carlos Tavares (Stellantis), en contra de la prohibición de la UE
Carlos Tavares, CEO de Stellantis, está siendo una de las voces más críticas con la Unión Europea. A pesar de que el grupo franco-italo-americano discontinuará su oferta térmica en Europa a partir de 2030, lo cierto es que el ejecutivo no ve con buenos ojos la evolución del mercado.
«No estoy preocupado por Stellantis. Me preocupa la clase media que no podrá comprar coches que cuestan 30.000 euros«. Además, el directivo también ha criticado en varias ocasiones la normativa Euro 7 y la falta de medidas proteccionistas frente a los fabricantes de coches eléctricos chinos.
«No creo que Europa necesite [la normativa] Euro 7. Va a desviar parte de nuestro I+D a algo que no necesitamos, mientras que nuestros competidores chinos ingresan al mercado únicamente con coches eléctricos a baterías. ¿Por qué estamos usando nuestros recursos en una tecnología que queremos prohibir? No es de sentido común.
Si hay algo que temer es el declive del mundo occidental. Necesitamos trabajar de manera más eficiente para vencer a los chinos no solo en tecnología sino también en calidad, precio, servicio… Ese es el problema principal que tenemos delante. El mercado europeo está completamente abierto a los chinos y no sabemos si su estrategia es ganar cuota de mercado con pérdidas y aumentar su precio más tarde».
Fuente | Automotive News Europe