España es uno de los países que más coches eléctricos fabrica de Europa. En los últimos cinco años ha incrementado la producción de este tipo de vehículos en un 500%. Las medidas aprobadas por los diferentes gobiernos están dando sus frutos y ya hemos normalizado poder conducir uno.
La revolución del coche eléctrico español es el resultado de una combinación de factores, que incluyen la demanda del mercado, los incentivos y las ayudas gubernamentales, así como las mejoras tecnológicas. y las políticas de la Unión Europea.
Las ayudas a la compra de vehículos eléctricos desde 2011, y el Ministerio de Industria, Energía y Turismo de España prevé que para 2023 habrá más de 700.000 vehículos eléctricos en uso en nuestro país.
Coches eléctricos y seguros, ¿qué hacer?
A la hora de adquirir uno siempre debemos pensar en el seguro. Son muchas las personas que se preguntan si asegurar un coche eléctrico tiene alguna diferencia con respecto al coche de gasolina o diesel. No hay nada que lo diferencia, los seguros ofrecen las mismas coberturas dependiendo de la modalidad que elijas, tanto si es a terceros, un terceros con luna o completo o un todo riesgo, ya sea con o sin franquicia.
Los seguros del RACC destacan por la gran satisfacción de los usuarios, y por ofrecer unas excelentes coberturas sin que el precio suponga un inconveniente. De lo que no cabe duda es que una compañía líder siempre es un buen respaldo si tenemos cualquier tipo de incidencia en la carretera.
Los coches eléctricos están revolucionando la manera en la que nos movemos, y el aumento de la autonomía de los vehículos, así como la ampliación de estaciones de carga hace que su compra se convierta en algo muy habitual. Amigables con el medio ambiente En el pasado, España ha ocupado muchos debates por sus altos niveles de contaminación en ciudades derivados de la densidad del tráfico.
Con la introducción de los coches eléctricos, esto ya ha comenzado a cambiar. El gobierno está haciendo un esfuerzo para invertir en esta tecnología y hacerla más accesible para todos los ciudadanos, promoviendo ayudas que bonifiquen la compra de estos vehículos.
Los coches eléctricos han cambiado la forma de moverse en España al reducir la contaminación del aire y facilitar una rebaja de los gases contaminantes y del ruido. Este cambio en las tendencias está dando ya resultados, que invitan a la esperanza.
Por parte de la Unión Europea ya se ha puesto una fecha, el año 2035, para que dejen de producirse coches de combustión, dando un impulso a los vehículos eléctricos muy necesario. Otras propuestas como el coche de hidrógeno, ecológicamente muy sostenibles también, están comenzando a despuntar, aunque es una tecnología que todavía está en fase de desarrollo.
En las ciudades españolas podemos ver ya con normalidad coches eléctricos circulandos, lo que ha llevado a mejoras significativas en la calidad del aire. Según un estudio de SAE International, «en Madrid hubo dos días de 2018 en los que la ciudad no superó su límite máximo seguro para las concentraciones de PM2,5», mientras que la concentración media de PM2,5 en París fue 19 veces superior a la de Madrid.
El estudio también encontró que en Londres y Roma, la cantidad acumulada de días en los que los niveles de calidad del aire cayeron por debajo de los límites seguros tanto para partículas como para dióxido de nitrógeno fue de alrededor del 70%.
El cambio de tendencia ya ha comenzado y el coche eléctrico no es ninguna excentricidad. Comenzaremos a acostumbrarnos a convivir en ciudades con menos ruidos y una calidad de aire mucho mejor que la actual.
