Este informe vaticina consecuencias devastadoras para la industria automotriz europea a cuenta de China

La industria automotriz europea se enfrenta a grandes desafíos debido al creciente dominio de China en el mercado de vehículos eléctricos, lo que llevará a una reorganización y posibles pérdidas de ingresos.

Así lo afirma el estudio realizado por Allianz Trade, que concluye que es necesario abordar estos desafíos mediante adaptaciones a la base de proveedores, satisfaciendo las necesidades cambiantes de los clientes y promoviendo la competencia en el mercado de vehículos eléctricos.

El informe de Allianz Trade también advierte que la industria automotriz europea se enfrenta a una reorganización masiva y una pérdida potencial de ingresos debido a los cambios que se están produciendo en el mercado de vehículos, impulsados por la creciente participación de China en el segmento de vehículos eléctricos.

De hecho, estima que la industria automotriz europea podría reducirse en 24.000 millones de euros al año, y las industrias de la cadena de suministro asociadas podrían reducirse en 21.000 millones de euros adicionales.

El informe destaca varios factores, como el cambio hacia una sociedad menos centrada en el automóvil, el liderazgo de China en vehículos eléctricos, la menor cantidad de componentes en los vehículos eléctricos y la prohibición europea de nuevos vehículos de combustión interna a partir de 2035.

Esto es algo que toma especial importancia para Europa por varias razones. Por un lado, el sector automotriz es el sector industrial más grande de Europa, representando el 10 % de la industria manufacturera en general. Además, tiene un impacto importante en las industrias upstream, como los metales, los plásticos y la electrónica.

Adicionalmente, en la industria automotriz europea se ensambla localmente el 80 % de los automóviles vendidos en Europa. Y, por si fuera poco, las exportaciones generan un superávit comercial significativo para la economía europea, que ha oscilado entre 70.000 y 110.000 millones de euros anuales en la última década.

El vehículo eléctrico crece a buen ritmo

El cambio hacia los vehículos eléctricos está transformando la industria automotriz europea, señala un informe realizado por Allianz Trade que destaca que en 2022 las ventas de vehículos de energía alternativa alcanzaron un récord de 4,4 millones de unidades, representando el 47 % de todas las matriculaciones de vehículos nuevos en Europa.

De hecho, los vehículos eléctricos de batería (BEV) lideraron este crecimiento, con un aumento de ventas del 28 % y representando el 12 % de todas las matriculaciones de vehículos nuevos.

Y con la prohibición prevista de los motores de combustión interna para 2035, la industria automotriz se encuentra inmersa en una reorganización completa, afrontando cambios en su cadena de suministro, las demandas cambiantes de los clientes, la competencia de nuevos actores y la evolución de un mercado menos centrado en los automóviles.

China es el principal enemigo

Sin embargo, el mayor riesgo para la industria europea proviene de China. Hace 15 años, China reconoció el potencial de los vehículos eléctricos y, desde entonces, ha invertido fuertemente en la construcción de un ecosistema de vehículos eléctricos competitivo.

Como resultado, China lidera el panorama mundial de vehículos eléctricos, vendiendo más del doble de BEV en 2022 en comparación con Europa y Estados Unidos juntos. Además, tiene una ventaja competitiva en casi todos los aspectos de la cadena de valor de los vehículos eléctricos.

Las marcas chinas representan más del 80 % de las ventas de vehículos eléctricos en su propio país, lo que ha llevado a un aumento significativo en su participación de mercado, pasando del 40 % en 2020 al 50 % en 2022. Al mismo tiempo, las importaciones chinas ya representan tres de los BEV más vendidos en Europa.

Números preocupantes

Si los fabricantes chinos aumentan su cuota de mercado nacional al 75 % para 2030, los fabricantes europeos podrían perder más de 7000 millones de euros en beneficios netos anuales para ese año, determina el informe de Allianz Trade.

Esto también resultaría en una caída del 39 % en las ventas totales de los fabricantes de automóviles europeos en China, y la producción local se reduciría de 4,4 millones de unidades a 2,7 millones en 2030.

Se estima que las importaciones europeas de automóviles fabricados en China podrían alcanzar 1,5 millones de vehículos en 2030, lo que tendría un impacto significativo en el valor agregado de la economía europea, llegando a los 24.200 millones de euros en el sector automotriz.

Europa tiene que reaccionar

Finalmente, el informe de Allianz Trade anima a las instituciones a tomar medidas para reducir o detener esta tendencia con potenciales consecuencias catastróficas para la industria automotriz del continente europeo.

Para abordar estos desafíos, los responsables de la formulación de políticas podrían buscar términos comerciales recíprocos con China y Estados Unidos, propone Allianz Trade.

También promover una infraestructura de carga mejorada para impulsar la adopción de vehículos eléctricos, permitir la inversión china en el ensamblaje local de automóviles para generar más valor agregado en Europa, aumentar la autosuficiencia en materias primas críticas para la fabricación de baterías e invertir en tecnologías de baterías de próxima generación.

Estas medidas ayudarían al sector automotriz europeo a prepararse para los desafíos del futuro y a mitigar los posibles impactos, concluye dicho documento.

Fuente adicional | The Driven