Volkswagen no entrará en la guerra de precios de China bajo ningún concepto
3 min. lectura
Publicado: 02/06/2023 10:39
Ralf Brandstaetter, máximo responsable de Volkswagen en China, ha confirmado que el grupo no participará en la guerra de precios que actualmente se está librando en el país asiático a pesar de la delicada situación que está atravesando en dicho mercado debido a la tibia acogida de su gama eléctrica ID.
«Volkswagen se está enfocando en un modelo de negocio sostenible. En términos concretos, esto significa que no participaremos en la batalla de los descuentos a ningún precio. Nuestra posición en el mercado es lo suficientemente fuerte. Para nosotros, el enfoque está en la rentabilidad, no en el volumen de ventas ni en la participación de mercado».
El ejecutivo estima que, para el año 2030, el mercado automovilístico chino llegará a unos 28-30 millones de unidades anuales, frente a los actuales 22 millones. «Si logramos unas ventas de más de 4 millones de vehículos en 2030, con la rentabilidad correspondiente, es una posición con la que muy bien podríamos vivir».
A principios de año, la autóctona BYD superó a Volkswagen como la marca más vendida del país tras años de férreo dominio. Brandstaetter señala que es irrelevante si otro fabricante nacional vende más que ellos, pues aspiran a ser el mayor fabricante de automóviles internacional de China.
El auge de las marcas chinas pone en aprietos a la industria europea
Entre enero y marzo de este año, BYD matriculó un total de 440.000 automóviles en la región, frente a los 427.247 ejemplares despachados por Volkswagen. El conglomerado asiático, que recientemente comenzó la expansión de su gama de turismos eléctricos en Europa, ha conseguido adelantarse a sus propios objetivos, ya que no contaba con lograr el sorpasso hasta finales de 2023.
La actual guerra de precios en el sector del coche eléctrico comenzó a principios de año de la mano de Tesla, que ajustó varias veces seguidas las tarifas de los Model 3 y Model Y. Una vez abierta la veda, algunas marcas chinas decidieron seguir la agresiva estrategia de la compañía estadounidense, si bien otras como NIO prefirieron quedarse al margen para proteger su rentabilidad y el valor de sus modelos usados.
La inmensa mayoría de fabricantes tradicionales también han rechazado participar en esta batalla, probablemente debido a que operan con un margen de beneficio mucho más bajo que el de Tesla. Además, a nivel de costes todavía no pueden competir con las firmas chinas, que les llevan una importante ventaja tras años de inversiones masivas y apoyo estatal.
Fuente | Automotive News Europe