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Quién dijo que un coche eléctrico no puede ser ligero: este Carice TC2 pesa tan solo 590 kg

La empresa holandesa Carice ya está en fase de producción de su segunda joya sobre ruedas, el TC2. Hace unos años sorprendió a todos con su MK1, una propuesta elegante, eléctrica y artesanal que tiene ahora su continuidad con un segundo modelo igual de especial, o más si cabe.

Ambos tienen algo en común: aúnan la tecnología actual con un diseño retro, pero además son auténticos ‘peso pluma’, centrados en la pureza de la conducción. No esperes altas cifras de potencia, porque tampoco lo necesita este nuevo Carice TC2 que presenta guiños, lo reconozcan o no, al mítico Porsche 550 Spyder.

El interior del Carice TC2 hace de este eléctrico ligero todavía más especial.

Carice TC2, un coche eléctrico especial

«Extremadamente ligero, dinámico y elegante», así define Carice su nueva creación, que ya está en producción de su primera tirada tras una década de ajustes y pruebas. Lo especial de este vehículo es que ha sido diseñado y desarrollado desde cero: nada de adaptaciones ni de los llamados ‘restomod’.

El Carice TC2 eléctrico se produce en los Países Bajos de forma artesanal y solo por encargo. Personalizable al máximo en sus 3,54 metros de longitud, cuenta con un habitáculo abierto muy especial y cuidado al detalle, en el que nos encontramos con un volante de estilo clásico y una tapicería a juego.

Su peso, como decíamos, está especialmente calculado: apenas 590 kg, incluyendo el peso de las baterías, de hasta 31,5 kWh de capacidad. Estas se ofrecen en dos configuraciones diferentes: estándar, con 200 km de autonomía, y grande, que estira el alcance eléctrico hasta los 300 kilómetros. Su motor eléctrico de «bajo consumo» desarrolla apenas 56 CV, una cifra que puede parecer escasa, pero para nada teniendo en cuenta el peso que debe arrastrar.

¿Su precio? El Carice TC2 se anuncia en su página web con un precio de partida de 44.500 euros, impuestos aparte. No incluye ni dirección asistida, ni control de tracción, ni ABS, ni los típicos ADAS que vemos en la actualidad. Con su elegante diseño y las sensaciones de conducción deberían bastar para hacer de este coche eléctrico holandés más especial si cabe que el Carice MK1 que conocimos hace unos años.

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Si estás interesado en uno, debes saber que puedes realizar un pedido, pagando un depósito del 75% del precio de compra. Sin embargo, el fabricante ha anunciado que su lote de producción actual está agotado, aunque planea iniciar una nueva ronda de producción dentro de unos meses.

Fuente | Carice Cars

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