Renault cancela la salida a bolsa de su división eléctrica Ampere. ¿Por qué?
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Publicado: 30/01/2024 08:48
Renault finalmente no sacará a bolsa su nueva división de coches eléctricos y software, Ampere, debido tanto a las condiciones actuales del mercado bursátil como a los buenos resultados obtenidos por el grupo el año pasado, que garantizan su capacidad para financiar sus futuros desarrollos. Este movimiento no tendrá impacto en sus planes estratégicos.
La firma del rombo aspiraba a lograr una cotización de 10.000 millones de euros para su nueva división; sin embargo, en los últimos meses todo apuntaba a que se quedaría por debajo de los 5.000 millones de euros. A finales del año pasado la compañía ya advirtió de que, si su valoración resultaba demasiado baja, se cancelaría la operación, que es exactamente lo que ha terminado ocurriendo.
La lenta evolución de las ventas de coches eléctricos y la incertidumbre política en Estados Unidos y Europa parecen haber llevado al sector del coche a un impasse. Algunos analistas señalan que su crecimiento prácticamente se estancará en 2024, un panorama poco halagüeño que habría motivado a Renault a ser más conservadora.
Al cancelar su salida a bolsa, Ampere evitará correr la misma suerte que Polestar, cuyas acciones llevan ya un tiempo estancadas y actualmente depende de sus dos principales inversores, Geely y Volvo, para asegurar su continuidad. Sin ir más lejos, ayer mismo la firma sueca anunció que tendría que suprimir aproximadamente 450 puestos de trabajo a nivel mundial, el 15% de su fuerza laboral.
Ampere reducirá los costes de la próxima generación de coches eléctricos de Renault en un 40%
Ampere quiere alcanzar unas ventas anuales de 300.000 coches eléctricos para 2025 y de 1 millón en 2031. Para entonces, la alineación eléctrica de Renault en Europa estará compuesta por siete modelos: Twingo, R5, 4EVer, Mégane, Scénic, un SUV de siete plazas y un SUV «coupé». A ellos tendríamos que sumar las propuestas de Alpine y Dacia.
Además, también realizará desarrollos para Mitsubishi, Nissan y probablemente Volkswagen. A pesar de haberse abortado la operación de salida a bolsa, las dos marcas japonesas mantendrán su inversión en Ampere. No está claro si Qualcomm seguirá sus pasos, ya que Renault todavía se encuentra negociando con el gigante tecnológico.
El objetivo de Ampere es alcanzar la paridad de precios entre coches eléctricos y térmicos antes que sus principales rivales, algo que logrará reduciendo los costes de desarrollo y producción de su próxima generación de modelos (2027-2028) en aproximadamente un 40%. La fortaleza de la joven unidad radica, según sus dirigentes, en que combina la agilidad de una startup con la experiencia y la escala de un fabricante tradicional.