Hace unos días hemos visto como en 2013, Tesla superaba a sus competidores en los Estados Unidos en el segmento premium. Pero ahora son los propios alemanes los que avisan de que la evolución de las ventas del fabricante norteamericano, son para preocuparse.
En total Tesla ha entregado en 2013 en todos los mercado 22.477 unidades del Model S. Esto supone acercarse mucho a las 39.717 unidades que ha logrado vender el Audi A8, y a las 24.789 del Porsche Panamera, sus grandes rivales.
Ferdinand Dudenhoeffer, director del Centro de Investigación Automotriz (CAR) en la Universidad de Duisburg-Essen, se refiere a la evolución de las ventas de Tesla, como simplemente asombrosas. Incluso teniendo en cuenta las ayudas recibidas por cada unidad vendida.
Su éxito en mercados como el noruego, donde ha sido el turismo más vendido dos meses, y Holanda, donde es el preferido en su segmento, avisan de que los clientes están cambiando su forma de entender los coches premium. La imagen de innovadores de Tesla, les permite situarse por encima del prestigio alemán.
Con el mercado norteamericano en fase de conquista, y el europeo instalando las bases para el asalto final, ahora las miradas se ponen en China. El mayor mercado del automóvil del mundo. Un lugar donde los coches eléctricos como Tesla juega con ventaja, por ser considerados una solución a parte de los graves problemas ambientales de sus grandes ciudades.
Y con todo esto, la producción del Model S vivirá una nueva aceleración a lo largo de este año, para alcanzar las 1.000 unidades a la semana. Esto supondría llegar a las 48.000 unidades en 2015, a las que tendríamos que sumar las que logre producir del Model X.
Vía | Dailygreen (alemán)
