Como usuario de un coche eléctrico he de admitir que nunca he usado el navegador de mi coche. Los recorridos suelen ser limitados por una simple cuestión de autonomía. No hay muchas posiblidades de perderse en el medio de la nada.
Es por eso que resulta hasta cierto punto absurdo que un fabricante pida una cantidad de dinero tan exagerada como la que tendrán que pagar los usuarios para actualizar el navegador del Nissan LEAF.
En la era de Google Maps y con el ejemplo de Tesla con sus mapas 3D y totalmente gratuitos, los 209 euros que nos piden en Nissan por actualizar el navegador del LEAF son un despropósito total. Sobre todo que la actualización comprende toda Europa. Como si el LEAF fuese un coche para ir de vacaciones por todo el continente.
Podemos pensar que hay usuarios que viven en lugares más céntricos y mejor conectados a nivel de infraestructuras de recarga. Pero sigue careciendo de sentido cargar semejante cantidad de dinero por una simple actualización. Un dinero con el que un LEAF puede pagar la electricidad suficiente como para moverse más de 20.000 kilómetros.
Se trata de un sistema que nos recuerda a las políticas de las grandes multinacionales de la música o el cine, que no han querido evolucionar y las nuevas tecnologías se las han llevado por delante. Esperamos que Nissan se de cuenta en el mundo en el que vivimos, y cambie este modelo de negocio y se adapte a los tiempos en los que estamos.
Vía | Facebook
Fuente | Nissan