¿Tendrá que renunciar Tesla al aluminio en el Model III?

Una de las peculiaridades del Model S es que su cuerpo está fabricado en aluminio. Una manera de reducir el enorme peso de la batería de 85 kWh que lleva en sus bajos. Una fórmula que puede ser válida para un coche de gama alta, pero que según algunos analistas, será muy difícil ver en el futuro Tesla Model III.
Como recordamos Tesla planea lanzar el modelo de tercera generación en 2017. Su principal característica es que tendrá un precio que partirá desde la mitad del coste del Model S, 35.000 dólares antes de ayudas. Por otro lado la autonomía según Tesla también partirá desde una cifra de unos 320 kilómetros con cada carga.