Esta semana Jaguar ha presentado su nuevo equipo que participará en esta nueva temporada de la Fórmula E. Una incorporación que supone todo un espaldarazo para el proyecto del coche eléctrico del fabricante británico.
Ahora desde Jaguar se ha confirmado que están trabajando en el que será su primer modelo eléctrico comercial Un nuevo miembro de la familia Jaguar que llegará en 2018, y lo hará dotado de un sistema eléctrico que se aprovechará de la experiencia que el fabricante acumulará en los próximos meses en la Fórmula E.
De momento el nombre, así como algunas de sus características, permanecen en secreto. Se especula que Jaguar echará mano de la reciente adquisición de la denominación E-Pace, que dará nombre a un todocamino eléctrico que llegará al mercado como decimos, en menos de dos años.
Como recordamos, el E-Pace se colocaría un peldaño por debajo del F-Pace en cuanto a tamaño. Un todocamino con ciertos aires deportivos, con una línea baja, y con todo el estilo y calidad de Jaguar. Sin duda, una combinación de lo más interesante. Un modelo que contaría con un frontal más pequeño y aerodinámico, que permitiría mejorar las cifras de penetración aerodinámica.
A nivel de batería los prototipos se estimaban usaban packs con capacidades de 70 kWh. Una cifra que con casi total seguridad se incrementará de forma sustancial para lograr al objetivo de autonomías de entre 450 y 500 kilómetros con cada carga. Cifras que aunque bajo el ciclo europeo, obligarán a este todocamino a montar packs en el orden de los 90 kWh cuyo proveedor nos falta poner nombre, pero que podría ser Panasonic, socio en el proyecto del equipo de Fórmula E.
También a destacar el aspecto del motor. Según los representantes de Jaguar, el diseño del sistema de propulsión es propio, y esperan contar con un sistema extremadamente eficiente y duradero. Siguiendo el ejemplo de otros fabricantes, como Tesla o Volkswagen, Jaguar optado por motores libres de tierras raras, optando por elementos como el aluminio para dar forma a los propulsores. Algo que desde el fabricante se indica permitirá reducir el coste un 60%, mientras se consigue aumentar su durabilidad un 30%.
En cuanto a la configuración mecánica, en la parte delantera encontraremos un motor de unos 114 CV controlado por una caja de cambios de una única relación. En la parte trasera por su parte se instalará un segundo motor de unos 195 CV, que estará controlado por una caja de cambios de 2 velocidades. Un sistema similar al que monta el BMW i8 y que le proporcionará una potencia conjunta de unos 308 CV.
Por otro lado con este proyecto Jaguar logrará rejuvenecer una imagen que se ha quedado algo anticuada en los últimos años, y también por supuesto, lograr un respiro en el espinoso tema de las nuevas regulaciones de emisiones contaminantes. Sobre todo en mercados como el norteamericano, donde las nuevas normativas de emisiones en estados como California se encaminan más a poner cuotas de ventas de eléctricos más que de la compra y venta de créditos de emisiones.
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Vía | Autocar
