¿Cuánto puedo ahorrar conduciendo un Nissan LEAF?

Una de las ventajas más claras de los coches eléctricos es, sin lugar a dudas, su bajo coste de uso. La electricidad más barata que la gasolina y la enorme eficiencia de la que gozan los motores eléctricos frente a los de combustión son los principales responsables de esta interesante característica de los coches dotados de sistemas 100% eléctricos.

Sin embargo, estos no son los únicos puntos de ahorro de los coches eléctricos. Al estar su motor formado por una sola pieza móvil frente a las docenas de un motor convencional, no tendremos que cambiar piezas de desgaste cada pocos años. Además, la fiabilidad de los motores eléctricos es muy elevada, por lo que sufrirán menos averías que los coches convencionales.

Por supuesto, no solo nos ahorraremos cambios de correas, sino también de aceite, e incluso aumentaremos la vida útil de los sistemas de frenado, pues gracias a la frenada regenerativa de la que hacen gala los coches eléctricos los frenos mecánicos se utilizan menos que en un coche tradicional, por lo que los cambios de discos y/o pastillas se realizarán cada más tiempo.

Incluso, podremos ahorrar dinero a la hora de aparcar, pues en ciudades como Madrid los coches eléctricos no tienen que pagar la tarifa de las Zonas Azul y Verde (Zona SER), por no mencionar que cuando se activen las restricciones por contaminación podremos seguir circulando en lugar de vernos obligados a coger el transporte público, tardando más en llegar al trabajo y gastando dinero en billetes.

Centrándonos en los fríos números, vamos a proceder a realizar una comparativa entre dos modelos equivalentes: un Nissan Pulsar y un Nissan LEAF, ambos compactos del segmento C, pertenecientes a la misma marca y basados en sendos chasis derivados de la plataforma B0 de la Alianza Renault-Nissan.

Mientras que el LEAF parte de los 29.800 euros, el Pulsar lo hace de los 13.900 euros. Si bien no podemos igualar la potencia (150 cv para el LEAF, 115 cv para el Pulsar DIG-T 85 kW), el PVP del Pulsar queda en 24.200 euros tras equiparlo con extras similares a los que lleva el LEAF de serie e incorporarle la caja de cambios automática.

El LEAF se ve muy penalizado por la ausencia de ayudas estatales, las cuales no incluimos en la comparativa, pues actualmente no se encuentran disponibles, si bien lo más probable es que para el año que viene se apruebe en España un nuevo plan de ayudas que rebajarán el precio del LEAF en 5.500 euros, dejándolo en una cifra más cercana a la del Pulsar y haciéndolo mucho más competitivo.

Consumos

El precio de la gasolina es actualmente de 1,27 euros el litro. En condiciones reales, el Pulsar gasolina gastará unos 7,1 litros por cada 100 km que es la media que nos ofrece Spritmonitor (Ver). Por lo tanto, recorrer 100 kilómetros nos costará aproximadamente 9 euros.

El Nissan LEAF por su parte en un uso mixto consumirá unos 16,5 kWh por cada 100 km recorridos, de acuerdo con las medidas de Spritmonitor. Con un precio del kWh de 0,084 euros con tarifa valle, conducir 100 kms con un LEAF nos saldrá por 1,4 euros. En caso de hacerlo con una tarifa sin discriminación horaria, siempre dependerá de nuestro contrato, pero de media podemos pagar en torno a los 10 céntimos el kWh, por lo que los 100 kms con el LEAF estará en torno a los 1.65 euros.

Ver | ¿Cuánto cuesta cargar un coche eléctrico en España?
Para alguien que haga un kilometraje reducido al cabo de un año (10.000 kilómetros, por ejemplo) el Pulsar le saldrá por 890 euros anuales sólo en gasolina, mientras que gastará 140 euros en electricidad para el LEAF dándole el mismo uso. Por lo tanto, el ahorro en 1 año será de 750 euros, y al cabo de 10 años, de 7.500 euros.

Lógicamente, cuantos más kilómetros mayor será el ahorro: para alguien que realice 20.000 kilómetros anuales (una cifra media), el ahorro al cabo de 10 años será de unos 15.000 euros. Más de lo que cuesta el Pulsar gasolina más económico.

A esto debemos añadir los menores gastos de mantenimiento (cifrados por algunos usuarios en más de un 40%), por lo que si el mantenimiento de un coche normal ronda los 8.000 euros tras 10 años de uso, con un coche eléctrico nos ahorraremos unos 4.800 euros (el mantenimiento del eléctrico rondaría los 3.200 euros).

Si a eso añadimos el ahorro en el impuesto de circulación que se da en algunas zonas, así como la exención de pagar la ORA en las grandes ciudades, nos da como resultado que con un coche eléctrico podemos llegar a ahorrar bastante dinero al cabo de 10 años de uso (con pocos kilómetros anuales, apenas unos pocos miles de euros, con un kilometraje medio, nos acercaríamos a los 10.000 euros de ahorro).

Estas cifras se rebajarán aún más en los próximos años gracias a la caída en el precio de los coches eléctricos, que dentro de unos pocos años se igualarán a los coches de combustión, haciendo muchísimo más interesante su compra, ya de por si muy recomendable.