Varios fiscales alemanes han comenzado a investigar a empleados y ex-empleados de Porsche (incluyendo a un miembro de la junta directiva), el reputado fabricante de coches deportivos del grupo Volkswagen, a raíz del escándalo de emisiones Dieselgate que salpicó en 2016 al grupo alemán y que parece que todavía sigue extendiéndose.
Alrededor de 10 localizaciones de Porsche en Baviera y Baden-Wuerttemberg fueron registradas por alrededor de 160 funcionarios, según dijo la fiscalía en la ciudad natal de Porsche, Stuttgart, en un comunicado. «Los tres sospechosos incluyen un miembro del consejo de administración y un miembro de la alta dirección de Porsche AG. El tercer sospechoso ya no está empleado en Porsche AG«.
Esto forma parte de una investigación sobre aquellos empleados de Porsche sospechosos de fraude y publicidad fraudulenta vinculados al sistema de manipulación del control de emisiones de automóviles diésel, por lo que se confirma que son réplicas del escándalo Dieselgate.
Un portavoz de Porsche confirmó las investigaciones, pero se negó a proporcionar más detalles. Porsche y la fiscalía no han mencionado que otras personas estén bajo investigación. El director ejecutivo de Porsche, Oliver Blume, no es el miembro de la junta al que apuntan los fiscales según afirman algunas fuentes.
A principios de este año, los fiscales alemanes ampliaron la investigación a otra marca perteneciente al grupo Volkswagen, Audi, que desarrolló un motor diésel V6 3.0 que fue utilizado en aproximadamente 80.000 modelos de Volkswagen, Audi y Porsche, que estaba equipado con el software ilegal.
También se realizaron registros en dos sedes de Audi el miércoles pasado de acuerdo con los fiscales de Stuttgart y un portavoz de Audi. Las investigaciones tuvieron lugar en Ingolstadt y Neckarsulm, de acuerdo a lo publicado por Audi. Sin embargo, no se sabe si hay algún miembro de la dirección de la marca premium de Volkswagen bajo investigación.
Fuente | Autonews
