Renault ya permite terminar el contrato de alquiler de batería de sus coches eléctricos y tenerla en propiedad
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Publicado: 01/07/2018 11:00
Hace algún tiempo que Renault ha comenzado de forma discreta una campaña para ofrecer a aquellos propietarios de uno de sus modelos eléctricos, con batería en alquiler, el poder adquirir dicha batería y quedarse con ella en propiedad. Una opción que podrá interesar muchos a los propietarios de modelos como el ZOE, para los que la autonomía de la primera generación ofrece es más que suficiente, y que se muestran confiados dado el buen rendimiento que han logrados sus packs con el paso del tiempo.
De esa forma aquellas personas que dispongan de un coche eléctrico de Renault, ya sea el ZOE, la Kangoo, el Fluence o el Twizy, podrán solicitar en su concesionario más cercano el precio que tendrá quedarse con la batería en propiedad.
Con este cambio Renault quiere facilitar el cambio de vehículo a aquellas personas interesadas en vender su coche a otros consumidores. Algo que no es del todo fácil con un formato de alquiler de batería bastante confuso, sobre todo para los menos puestos en el tema. Algo que se facilita si se puede optar a ambos formatos.
En cuanto al coste, de momento desde Renault no se han dado cifras concretas, indicando que se trata de un asunto a tratar caso por caso. Y es que el coste dependerá de factores como los años del vehículo, los kilómetros recorridos, la degradación de la batería…Algo que hace difícil proporcionar un coste unitario para todos.
Pero no esperemos grandes chollos. El coste del pack de modelos como el ZOE es muy elevado en su origen. Se estima que las primeras versiones el pack de 22 kWh útiles, 23.3 kWh en la versión R240 producida a partir de 2015, el precio del pack superaba los 8.000 euros. Aplicada la depreciación, y como hemos dicho dependiendo del estado y los kilómetros, podemos pensar que el coste para terminar el contrato y quedarse con la batería para un modelo de entre 3 y 4 años se situará en unos 4.500 euros más IVA.
Esto supondría que después de este tiempo, el cliente habría pagado prácticamente la misma cifra con el alquiler que de haber comprado en su momento el coche con la batería en propiedad, pero con la diferencia de contar con una garantía más robusta, pero también con una limitación de kilometraje.
En la práctica, supondrá que el interesado en un ZOE de primera generación podría lanzarse a por un modelo con batería en alquiler, con ofertas desde poco más de 9.000 euros, probar el coche, y si se adapta a sus necesidades optar por la compra de la batería un tiempo después. O simplemente comprar el coche directamente con el pack en propiedad, lo que supondría un desembolso según el caso de entre 15.000 y 17.000 euros, IVA incluido.
Por otro lado nos queda por saber si esta misma operación se puede hacer con la nueva batería de 41 kWh. Sabemos que los propietarios de un ZOE con la anterior batería, y con ella en alquiler, podían optar al cambio por el nuevo pack. Pero no sabemos si pueden directamente pasar a un formato de compra de la misma en lugar de seguir con el renting.