EV West: conoce una de las más prestigiosas empresas dedicadas a la conversión de clásicos en coches 100% eléctricos

EV West es una empresa estadounidense especializada en la transformación de coches clásicos en eléctricos. Con poco más de una docena de técnicos, EV West ha conseguido cierta reputación a nivel internacional, habiendo transformado desde modelos de Volkswagen como el Beetle, la Transporter o el Karmann-Ghia, hasta deportivos como un Ferrari 308 GTS o un BMW M3 E36.

A pesar de que los coches clásicos contaminan más que los actuales, y que a nivel de prestaciones, tecnología, confort y seguridad son claramente inferiores, muchas personas optan por usarlos por el enorme encanto que tienen. El planteamiento de EV West es hacer que estos coches mantengan todo el encanto de sus antiguas carrocerías combinado con una mecánica moderna, prestacional y sostenible.

El pequeño garaje de la empresa está ubicado en San Marcos, California. La mayoría de coches eléctricos que transforman son clásicos de Volkswagen y Porsche, pero también han trabajado con FIAT, DeLorean, Ferrari, BMW, Ford… Además, venden componentes para transformar coches clásicos en eléctricos, e incluso kits de conversión completos para modelos específicos como el Volkswagen Beetle o el Toyota MR2.

EV West compra baterías para sus coches de forma habitual: cuando un Tesla Model S sufre un accidente, sus piezas a menudo se venden en subasta, algo que la compañía aprovecha para hacerse con ellas e instalarlas en coches clásicos. Los viejos motores son vendidos en el mercado de segunda mano, pues a día de hoy existe una gran demanda de este tipo de componentes vintage.

El precio por transformar un Beetle clásico es de 18.000 dólares, y el resultado es un coche capaz de alcanzar una autonomía de unos 160 km por carga. Montar baterías más capaces incrementa el precio, por supuesto. Sin embargo, también se ofrecen packs más económicos que incluyen todos los componentes menos la batería, para que el cliente instale la que crea conveniente.

Por el momento, el volumen del negocio es pequeño, pues apenas transforman una docena de clásicos al año. Sin embargo, la fama de sus Ferrari 308 GTS y BMW M3 100% eléctricos está dándole a la compañía la oportunidad de ir expandiendo su negocio, pues en Estados Unidos es mucho más fácil homologar este tipo de transformaciones que en países como España.

El ejemplo del Ferrari es el más conocido: el modelo se quemó en un incendio, y ellos lo restauraron y le instalaron un motor eléctrico. Esta transformación es particularmente polémica, pues como dijo una vez el difunto presidente de Ferrari, Sergio Marchionne, «un Ferrari eléctrico sería obsceno».

Fuente | EV West