Un nuevo estudio realizado por la Asociación Europea de Contratistas Eléctricos (AIE) anticipa que se crearán cerca de 200,000 empleos en el sector eléctrico para 2030 como resultado de un cambio hacia el coche eléctrico. Un número que indican será más del doble del que se estima puede perderse en la fabricación de automóviles debido a la mayor simplicidad de los eléctricos.
El estudio toma en cuenta todas las partes nuevas de la cadena de valor automotriz necesarias para impulsar la revolución del coche eléctrico. Esta incluye desde la fabricación de las baterías y cargadores, instalación, operación y mantenimiento de puntos de recarga, conexión y refuerzo para las redes eléctricas, además del incremento de la generación de electricidad.
Giorgia Concas, secretaria general de AIE, dijo: “El cambio hacia los coches eléctricos creará 200.000 nuevos empleos, la mayoría para contratistas eléctricos en toda Europa. Más del 90% de las empresas contratistas de electricidad son pequeñas y medianas empresas, por lo que la movilidad eléctrica es una gran oportunidad comercial para que las empresas locales generen empleos locales, verdes y altamente cualificados».
Janne Skogberg, experta en electromovilidad en AIE, agregó: “Los trabajos que se producen a través de un cambio hacia los coches eléctricos se convertirán en un motor importante para las economías locales. Estos trabajos no pueden ser deslocalizados ni reemplazados por robots y proporcionarán un empleo seguro en toda Europa durante las próximas décadas. El estudio estima que para 2060 se crearán más de 1.2 millones de trabajos, más que suficientes para reemplazar los trabajos de manufactura que se pierden a través de la automatización y el cambio a automóviles eléctricos con batería que son más fáciles de construir y requieren menos mantenimiento «.
Oddvin Breiteig, Experto en Electromovilidad en AIE declaró: “200.000 empleos es solo la punta del iceberg en términos de potencial de trabajo para la electromovilidad. El estudio solo considera los vehículos de pasajeros, pero los autobuses, camiones y barcos ya están siendo electrificados y crearán aún más trabajos de ingeniería eléctrica ecológicos.
La instalación de puntos de recarga también se realizará en paralelo con las redes inteligentes y las soluciones de construcción, como la instalación de sistemas de energía solar fotovoltaica y baterías. Además de los beneficios ambientales, existe un potencial económico innegable de un cambio a la movilidad eléctrica.»
Un ejemplo de que el potencial del coche eléctrico no se limita sólo a la importante cuestión de la reducción de emisiones, o el menor coste operativo. También tendrá grandes implicaciones en el empleo que creará gracias a las nuevas oportunidades que deben ser aprovechadas por los gobiernos y las empresas, y evitar que de nuevo todo este flujo económico se encamine a otros mercados.
Podéis leer todo el informe en este enlace.
