Desde hace ya un tiempo, Uber está desarrollando su propia tecnología de conducción autónoma. Si bien a principios del año pasado tuvieron que suspender las pruebas en carretera de sus coches autónomos debido al atropello de un peatón, en diciembre retomaron sus test, desmintiendo los rumores que apuntaban a la venta de su división de conducción autónoma.
Actualmente el vehículo empleado por Uber para desarrollar su tecnología es el Volvo XC90, un SUV de gran tamaño proporcionado por la marca sueca ya dotado de todo el hardware necesario para la conducción autónoma. Sin embargo, parece que ahora Uber quiere ir más allá del mundo de las cuatro ruedas y desarrollar soluciones de conducción autónoma específicas para otros tipos de vehículos.
Así, Uber estaría trabajando para integrar sus sistemas de conducción autónoma en sus bicicletas eléctricas y en sus scooters, de acuerdo con el director ejecutivo de 3D Robotics, Chris Anderson. El Grupo de Tecnologías Avanzadas de Uber (ATG) realizó este anuncio durante el pasado fin de semana. Así, las bicicletas y scooters eléctricos deberían ser capaces de ir por sí mismos a los lugares de carga o de recolocarse en zonas con mayor demanda gracias a la tecnología de conducción autónoma, tareas que a día de hoy se realizan con camiones que recogen y reubican los vehículos.
Aparentemente Uber ha creado una nueva división dentro de la compañía con el objetivo de desarrollar bicicletas y scooters eléctricos totalmente autónomos. Esta división, bautizada como MicroMobility Robotics, se situará dentro del grupo Jump, empresa adquirida recientemente por Uber y encargada de gestionar sus servicios de bicicletas y scooters eléctricos compartidos.
La nueva división ya está buscando empleados, como reza un reciente comunicado de la compañía: «El equipo New Mobilities de Uber está explorando formas de mejorar la seguridad, la experiencia del conductor y la eficiencia operativa de nuestros scooters y bicicletas eléctricas compartidas mediante la aplicación de tecnologías de detección y robótica».
Actualmente las bicicletas de Uber-Jump ya cuentan con ciertas funciones avanzadas relacionadas con el autodiagnóstico de fallos y averías. A pesar de que este tipo de servicio se caracteriza por su sencillez, Uber está invirtiendo una gran cantidad de dinero en I+D para desarrollar tecnologías de aplicación directa en sus bicicletas y scooters.
Por el momento, la mayor parte de la competencia se está centrando en mejorar el hardware de sus vehículos de dos ruedas, mientras que Uber se ha enfocado en el software, algo que podría darles una gran ventaja competitiva en el futuro.
Fuente | Electrek
